Tanto positivos con síntomas como asintomáticos dejan ese rastro del virus en las aguas residuales, que se estudia gracias lo largo puntos de control que se establecen en de la red de saneamiento. Según los expertos serviría también para prever un rebrote antes de tener los datos de pruebas en la población.
Puede ayudar incluso en la decisión de aislar una zona o desconfinarla cuando ese agua esté limpia de virus. Una herramienta poderosa siempre que sea valorada e interpretada por las autoridades sanitarias de la manera más adecuada.
Los análisis de la presencia del coronavirus en las aguas residuales de València reflejan que la ciudad se encuentra en una "fase estable" después de transcurridas varias semanas desde que se inició el curso escolar.
Así lo ha explicado la concejala de Ciclo Integral del Agua, Elisa Valía, que ha presentado este viernes en rueda de prensa los resultados del análisis, según ha explicado el Ayuntamiento de València en un comunicado. La edil ha apelado a "la responsabilidad y el esfuerzo de la ciudadanía, porque en cuestión de propagación del virus, en un período de 7-10 días" la situación puede variar.
Por zonas, Nou Campanar, Ciutat Vella y Quatre Carreres son las de mayor incidencia de COVID-19 en la última semana. El Palmar "también ha registrado un aumento significativo", por lo que desde el consistorio estarán "muy pendientes", si bien se trata de un área "geográficamente bien aislada y se pueden acotar bastante bien las medidas", ha explicado Valía.
"Estamos también pendientes de los sectores que tienen algún hospital, porque podría desvirtuar evidentemente los resultados", ha detallado, antes de explicar que se está desarrollando "toda una metodología para interpretar los resultados, que no siempre son fáciles", ya que hay que tener en cuenta "la fisionomía de la propia red de alcantarillado, porque hay algunas zonas que tienen más caudal que otras y, por tanto, un mismo valor en un punto y en otro puede representar diferentes cosas".
La edil ha destacado como "hito fundamental" en el estudio de restos de coronavirus en las aguas residuales de la ciudad el 7 de septiembre, "cuando se inició la actividad escolar" y "se iniciaban también otras muchas actividades". "Hemos estado muy pendientes durante las dos semanas posteriores de cómo se desarrollaban los análisis y los resultados para ver la incidencia y la propagación del virus".
En ese sentido, ha asegurado que la ciudad está "en una fase estable". "Nos encontramos en una fase de cierta estabilidad, dentro de que nos encontramos en una fase de magnitudes más altas, de valores más altos si tenemos en cuenta desde el inicio del estudio", que comenzó a realizarse el pasado 12 de mayo.
Así, ha asegurado que "la magnitud está siendo relativamente estable" y que, aunque hay "unos días con mayor incidencia que otros", se regustran "incrementos espectaculares o significativos que supongan un indicio de que pueden incrementarse los números de PCR de la ciudad", ha señalado.
De hecho, los datos de la Conselleria de Sanidad sobre PCR confirmados en el municipio de València "reflejan una situación similar a la que reflejan los análisis de aguas residuales", ha indicado. "Ahora mismo estamos en un momento en que podemos decir que la cantidad de PCR que se van confirmando día a día están estabilizados, tenemos unos resultados que por lo menos demuestran un control de la situación", ha añadido.