El gran error que cometemos en el ascensor cuando vamos solos
Una doctora advierte del peligro de contagio de coronavirus al retirarse la mascarilla en el ascensor, aunque uno suba sin compañía
La doctora María Inmaculada Flórez Álvarez, licenciada en Medicina por la Universidad de Valladolid en 1986 y especializada en Cirugía Cardiovascular en la Clínica Universidad de Navarra en 1992, ha advertido en Twitter de un error que cometen muchas personas cuando se montan solas en un ascensor: quitarse la mascarilla con la creencia de que, al no haber nadie más, no va a pasar nada.
Según subraya la doctora, que trabaja en el Centro Médico de Asturias, en Oviedo, supone un claro inconveniente relajarse hasta tal punto. Y es que en los ascensores de la mayoría de las casas, las puertas se quedan cerradas y no se puede ventilar el interior. Por lo tanto, las probabilidades de contagio
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Flórez Álvarez hace referencia en su mensaje a otro del doctor Miguel Marcos, que destaca la importancia "del inóculo viral o cantidad de virus que se inhala como factor de relevancia para la gravedad de la infección por SARS-CoV-2". "Aparentemente, cuanto menos inóculo, mayor probabilidad de ser asintomático o enfermedad leve. ¿Y qué reduce el inóculo? No sorprende, la mascarilla", destaca.
Por otra parte, el doctor Richard Corsi, experto en el control de la polución en edificios, ha llegado a asegurar que las personas podrían infectarse en los ascensores en solo unos segundos sin contacto directo.
En teoría, las gotas y superficies contaminadas se pueden evitar permitiendo solo una persona por viaje y con una buena higiene de manos. Sin embargo, si se confirman que los aerosoles transmiten la enfermedad, una persona podría infectarse a pesar de tomar estas medidas preventivas.
No obstante, pocos informes técnicos han recomendado medidas concretas para evitar la transmisión de covid-19 en los ascensores. Uno es el Centro de British Columbia para el control de enfermedades de Canadá, que recomienda una distancia mínima entre usuarios de dos metros, y que el número permitido de personas debe anunciarse en un letrero en la puerta del elevador.