Ni crema, ni aceite: lo nuevo para proteger la piel es el agua solar con factor de protección
Tan ligero como el agua y con factor de protección frente a los rayos UV
Te lo puedes poner hasta encima del maquillaje
Si la protección solar es importante cada día del año, en esta época se convierte en obligatoria, pero pringarte de pies a cabeza con cremas o aceites se puede convertir en un serio inconveniente para crear el hábito de usarla a diario. Las nuevas aguas solares con factor de protección son una alternativa que protege la piel de los rayos UV de manera cómoda, fresca y ligera.
La importancia de la protección solar
Los rayos ultravioleta (UVA y UVB) provocan efectos nocivos en la piel que van del envejecimiento prematuro (manchas, arrugas, deshidratación, pérdida de colágeno y elastina) hasta enfermedades de la piel más o menos peligrosas. En un país con tantas horas de sol como España no es posible evitar la exposición a las radiaciones solares, de hecho, es necesaria para la síntesis de vitamina D, pero se debe controlar el horario y proteger la piel de los rayos UV con un factor de protección adecuado.
Tan importante como aplicar la protección solar es reaplicarla antes de que pierda su eficacia. Eso, en un día de playa, supone tener que aplicarla cada dos horas, lo que supone suplicio cuando a la sal y la arena que ya llevas en el cuerpo hay que sumarle una crema o un aceite.
Propiedades de las aguas solares con protección
Estas aguas con SPF, que están especialmente pensadas para la cara y el escote, son perfectas para quienes no soportan la sensación pegajosa de los filtros solares. A pesar de su ligereza, estas aguas proporcionan una protección de amplio espectro frente a los rayos ultravioleta (UVA y UVB). Su textura, que es ligera, penetra con facilidad en la piel sin dejarla pegajosa ni grasa, además refrescan, no dejan rastro y son cómodas de usar. Las fórmulas creadas por Vichy, Bioderma, Mesoestetic, Filorga o Bruno Vassari están enriquecidas con activos antioxidantes, hidratantes y antienvejecimiento. Eso supone, en un solo gesto, protegerse contra los radicales libres y activar las defensas naturales de la piel. También es de destacar la comodidad de su forma de aplicación, ya que basta agitar, pulverizar sobre la piel y dejar secar, sin necesidad de masajear para extender el producto.
Finalmente, un detalle importante es que se pueden usar sobre el maquillaje, eso te permite llevarla en el bolso por si surge un día de terracita al sol y necesitas aplicarte protección solar en la calle.