Numerosos científicos se encuentran actualmente estudiando el nuevo coronavirus. Dos estudios recientes de los Estados Unidos aseguran que existen nuevas mutaciones.
Los expertos de la Arizona State University han investigado a partir de diferentes muestras tomadas de pacientes infectados. A través del análisis de todas ellas, han descubierto una mutación. Están pendientes de nuevos estudios, pero vaticinan que esta mutación podría debilitarlo.
Por su parte, desde el laboratorio Los Alamos National, también han establecido la existencia de una nueva cepa, diferente a la que surgió en Wuhan y, desgraciadamente y al contrario que en el anterior estudio, más infecciosa.
Esta última mutación facilitaría las labores de contagio del coronavirus. Tiene la capacidad para convertirse en predominante allá donde llega. Su origen podría estar en febrero en el continente europeo.
A estos estudios se suman algunos más. Como el procedente de Reino Unido, concretamente del University College. Según sus investigaciones y tras haber cogido muestras de 7.5000 contagiados, hablan de un total de 200 mutaciones.