¿Tapar una herida o dejarla al aire? Qué hacer para que cure antes

Todos nos hacemos heridas. Es inevitable sobre todo si practicamos algún deporte o si trabajamos con las manos, por ejemplo, y saber cómo curarla es fundamental para evitarnos malos tragos y problemas mayores. ¿Cómo debe curarse una herida para que sane antes? ¿Es mejor taparla o dejarla al aire?

Si tienes niños lo más seguro es que tengas un botiquín en casa bastante completo, con utensilios para quemaduras, rasguños y cualquier herida que puedan hacerse, no obstante todos deberíamos tener a mano una serie de cosas (y de conocimientos) porque nadie se libra de las heridas de vez en cuando. Tampoco los adultos.

Cómo curar una herida, paso a paso

Lo primero de todo es limpiar la zona donde te hayas arañado, golpeado o cortado. Fundamental: no utilices alcohol, no apliques polvos sobre la herida, ungüentos, ni pomadas con antibiótico, y nada de remedios caseros. Nada de esto ayudará. Y, a diferencia que lo que solemos pensar, tampoco es bueno utilizar algodón para limpiar una herida. Desinféctala con abundante agua y jabón y un antiséptico a base de clorhexidina, que tiene acción bactericida y fungicida.

No obstante, si no tienes otra cosa, utiliza agua oxigenada o el alcohol.

No soples sobre la herida, aunque la sientas arder. No es que el aire le venga mal, pero al soplar podemos expulsar bacterias de la boca y hacer que se infecte fácilmente. Si tienes una herida en la mano y quieres que seque rápido, simplemente agita la mano para que seque al aire.

Si te clavas un objeto grande, no lo retires porque hace tapón y evita que salga la sangre. Acude al hospital.

Si hay una pequeña hemorragia, procura hacer presión sobre la herida y tenerla tapada para que no sangre, pero no hagas torniquetes ni remedios caseros. Acude directamente al centro de salud.

La herida debe estar tapada. No solo no cicatrizará más rápido por estar al aire libre, sino que además puede infectarse. Si sangra, tápala con mayor esmero y pon el vendaje algo apretado para evitar que sangre en la medida de lo posible.

Deja quietas las costras o postillas. Arrancar una costra lo único que hace es reabrir la herida y hacer que la curación empiece de cero, además de que la herida puede secarse y eso retrasaría la cicatrización.

No uses povidona yodada o clorexhidina a la vez porque pueden ser contraproducentes y generar efectos adversos.

Para las quemaduras, enfría la zona con agua fría y acude a un centro médico, y nunca explotes las ampollas.

No dejes que dé el sol sobre la herida que está cicatrizando e hidrátala constantemente para que la piel tenga elasticidad y no quede marca.