La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha llegado a un acuerdo para configurar una oficina técnica municipal que lidere la actuación en las 255 residencias públicas y privadas que se encuentran en la ciudad ante la crisis del coronavirus.
El pasado viernes, Colau aseguraba que de las 213 muertes a causa del Covid-19 que había hasta entonces en la ciudad, como mínimo 54 eran ancianos en residencias, lo que suponía un 25% de los fallecimientos, y confirmaba que se iban a dedicar más esfuerzos, trabajo y atención a estos establecimientos. Este fin de semana, los bomberos han desinfectado el asilo de San Andreu donde han fallecido ya 25 abuelos.
Así, según ha informado El Periódico, tras una reunión celebrada este domingo, se configuró la oficina técnica municipal que pondrá a disposición a 900 trabajadores voluntarios de áreas del ayuntamiento inactivas para ayudar a frenar el coronavirus en estos lugares.
Los objetivos básicos de su creación son la desinfección de las zonas y la disposición de personal en residencias de ancianos para las labores que sean necesarias, que pueden cubrir las bajas de trabajadores infectados.