El IrsiCaixa ha demostrado que los vacunados con Pfizer tienen capacidad de bloquear la variante británica, al igual que los que se contagiaron del virus original de China, que desarrollan unos anticuerpos que mejoran con el tiempo y ofrecen mejor respuesta seis meses después de la infección.
El Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa, centro impulsado conjuntamente por la Fundación "la Caixa" y el Departamento de Salud, está estudiando la eficacia de los anticuerpos contra las diferentes variantes que existen hasta el momento para poder entender la evolución de la inmunidad contra el SARS-CoV-2.
Los resultados de este estudio, compartidos en el portal bioRxiv, apuntan que los anticuerpos por infección en la primera ola de la pandemia son robustos contra la variante británica.
Irsicaixa ha observado, en este sentido, que aquellas personas que pasaron el coronavirus original de Wuhan (China) tienen unos anticuerpos que se perfeccionan con el tiempo y que ofrecen más capacidad de bloquear la variante descrita en Gran Bretaña seis meses después de la infección.
Para llegar a esta conclusión, el IrsiCaixa ha evaluado la capacidad protectora de los anticuerpos de 53 personas que habían pasado la infección y de 32 personas que habían recibido las dos dosis de la vacuna de Pfizer/BioNTech.
Con el fin de poder evaluar la protección, IrsiCaixa ha trabajado con pseudovirus (producidos en el laboratorio), algunos de los cuales con el genoma del virus original y otros, con mutaciones propias de la variante británica.
Los resultados demuestran que las personas contagiadas bloquean muy bien y de manera muy similar tanto la variante original como la británica, pues desarrollan unos anticuerpos que se refinan con el tiempo y mejoran su capacidad de bloquear las nuevas cepas seis meses después de la infección.
En cuanto a las personas que han recibido dos dosis de la vacuna Pfizer/BioNTech y no habían pasado la infección anteriormente, sus anticuerpos son dos veces menos eficientes bloqueando la variante británica que la original.
Sin embargo, en todos los casos los niveles de anticuerpos son suficientemente elevados como para impedir la infección por ambas variantes.
Por otro lado, las personas que ya habían pasado la infección y luego recibieron la vacuna tienen anticuerpos que neutralizan muy eficientemente las dos variantes e incluso actúan mejor contra la británica.
"Los resultados nos muestran que la mayoría de personas tienen protección contra las dos variantes, pero no sabemos cuánto tiempo dura esta protección, y puede que haya personas que pierdan los anticuerpos", remarca a través de un comunicado Edwards Pradenas, investigador del IrsiCaixa.
Así que, según el experto, "hay que seguir llevando mascarilla, manteniendo la distancia social y siguiendo las medidas de prevención hasta que haya una incidencia muy baja de nuevas infecciones y un porcentaje muy elevado de población vacunada".