La Junta de Andalucía toma medidas para controlar la segunda ola de la pandemia de coronavirus. El gobierno andaluz ha aprobado este martes la restricción a seis personas del aforo de las reuniones , así como el confinamiento del municipio sevillano de Casariche, porque "sigue creciendo la pandemia".
Además han acordado la realización de cribados masivos en otros 11 municipios de la comunidad autónoma donde la tasa de incidencia es mayor de 500 positivos por 100.000 habitantes, según ha el consejero de la Presidencia y portavoz del Ejecutivo andaluz, Elías Bendodo, en la rueda de prensa tras la reunión semanal del Consejo de Gobierno.
En los municipios que tengan más de 500 casos confirmados de Covid-19 por 100.000 habitantes en los últimos 14 días, tales como son Pulpí (Almería), Almodovar del Río (Córdoba), Jamilena, Los Villares, Linares, en Jaén; La Campana, Villaverde del Río, Arahal y Paradas, en Sevilla, y Sierra de Yeguas y Villanueva de la Concepción, en la provincia de Málaga.
Bendodo ha explicado que la Junta esta especialmente preocupada por la incidencia de la pandemia en Lucena (Córdoba) y en Casariche, municipios donde ya se estaban practivando cribados masivos, de modo que si bien en Lucena la evolución es "altamente positiva", no ocurre lo mismo con la localidad sevillana.
Por eso, el Consejo de Gobierno ha acordado restringir la entrada y salida de personas los próximos 14 días en Casariche, de modo que "salvo cuestiones prioritarias como asistencias a centros sanitarios, a centros educativos o realización de exámenes o pruebas oficiales, entre otras cuestiones, el resto de actividades quedan restringidas".
"Estas medidas las tomamos en este caso en Casariche, porque es el único que sale de esos parámetros mínimos de control, y este es el protocolo aprobado ayer para aquellos municipios en los que se disparen los contagios", ha explicado el titular de la Presidencia.