La Selección Española se enfrenta este martes 9 de julio a Francia en la semifinal de la Eurocopa 2024, celebrada en Alemania. Durante su concentración en Donaueschingen, uno de los pueblos del estado federado de Baden-Wurtemberg en el distrito de Selva Negra-Baar, los jugadores cuentan con un equipo que les acompaña y al que pertenece el psicólogo Javier López Vallejo. El navarro de 48 años, además de desempeñar su tarea como terapeuta de la agrupación, también desarrolló una carrera como futbolista tras su paso por la cantera del AC Osasuna, el Villareal Club de Fútbol o el Zaragoza, clubes en los que se situó al frente de la portería.

Durante el torneo que pondrá su broche de oro el próximo 14 de julio en el Olympiastadion de Berlín, Javier ha ofrecido una entrevista a ‘Heraldo’ con la que ha hecho un balance sobre su trayectoria como psicólogo. Cuando todavía jugaba en el Osasuna, empezó la carrera de psicopedagogía y posteriormente, al fichar con el Villareal, se matriculó en el Grado de Psicología en la Universidad de Castellón.

Hace seis años, comenzó a ejercer de coordinador del departamento de Psicología en la Federación, primero en el fútbol femenino y desde hace un año y medio, al lado de Luis de la Fuente. “Fue genial”, ha afirmado al citado medio sobre el instante en el que recibió una llamada de parte del seleccionador.

Respecto a su trabajo en el equipo, ha señalado que se ocupa de dos vertientes: una con el seleccionador, con el que “está más tiempo”, al igual que con el cuerpo técnico; y otra con los jugadores, con los que está “en un período más largo” que la semana y media de la que dispone de forma habitual con ellos cada dos meses aproximadamente. “Básicamente con el seleccionador mi trabajo consiste en generar estabilidad emocional. La tarea de un entrenador es la de tomar muchas decisiones en muy poco tiempo, con no toda la información y bajo presión. De alguna manera le ayudo a que tenga toda la información y que elija lo mejor posible o por lo menos que se arrepienta lo menos posible”, ha confesado.

Al lado de los futbolistas, su tarea consiste en preparar las charlas tácticas: “El contexto de la selección es muy diferente a un club porque aquí no tenemos tiempo apenas para trabajar comportamientos tácticos, con lo cual las charlas todavía cobran más importancia. Es el único recurso que tenemos para que ellos automaticen ciertos comportamientos tácticos y los reproduzcan en el campo”, se ha sincerado.

En cuanto a los coloquios citados, reconoce que “hay muchos tipos”:  “Uno estándar debe tener claro el objetivo. Qué queremos transmitir. Hay un flujo de trabajo previo con los analistas del cuerpo técnico y hemos de definir si es una charla más táctica o más emocional. O es una charla en la que creemos que hay que trabajar más la confianza, pues ya es una charla muy diferente, hay que manipular otra variable para aumentar el nivel de activación”, ha dicho. Con cada una de ellas, pretende “acertar si es a nivel colectivo y las variables manipulables para dar el mensaje”.

Y es que, tal y como él mismo ha añadido y haciendo referencia al pensamiento del antiguo seleccionador, Vicente del Bosque, “no hay nada más injusto que tratar a todos de la misma manera ya que cada uno tiene unas necesidades, que son las que tiene que cubrir”. Unas exigencias que López Vallejo, al haber sido futbolista, “identifica antes porque él ya las ha vivido” y, como consecuencia, encuentra una posible solución, que no implica que sea la que a él le funcionó.

A su etapa como portero se refería también hace unos meses en TVE, donde hablaba sobre la importancia de contar con ayuda psicológica en la carrera futbolística: “Yo tuve dos psicólogos de manera esporádica. Si hubiera tenido más psicólogos, creo que los hubiera utilizado mucho y me hubiera venido muy bien”, declaró.