La revista especializada American Journal of Case Reports ha publicado el caso médico de una mujer italiana de 52 años a la que le extirparon un quiste ovárico de más de cinco kilogramos de peso, y 40 centímetros de largo, al que no había prestado atención por pensar que tenía obesidad mórbida. La mujer, de nacionalidad italiana, desarrolló el quiste en su ovario derecho durante diez años, pero no fue hasta hace dos años que los médicos se percataron de él.
La mujer, italiana, se sometió a una operación de seis horas y media para extirpar la masa, que se formó en su ovario derecho. Los médicos culparon del diagnóstico tardío al bajo nivel educativo, por lo que no se dio cuenta de que necesitaba buscar ayuda médica.
La mujer tenía el abdomen extremadamente hinchado y reflujo, que es cuando el ácido estomacal o la bilis regresan a través del esófago. También se quejaba de sentirse llena muy rápidamente, estreñimiento, dificultad para caminar y dificultad para respirar. Una ecografía reveló que su cavidad abdominal estaba totalmente ocupada por lesiones. A pesar del quiste masivo, tenía ciclos menstruales normales sin efectos hormonales.
Los médicos drenaron del quiste 37 litros de líquido marrón denso antes de realizar una histerectomía, un procedimiento para extirpar el útero y los ovarios. Luego, un cirujano plástico reconstruyó la pared del abdomen, ya que el quiste se había extendido por toda esa área. Seguidamente, un cirujano plástico le tuvo que reconstruir la pared del abdomen debido a que el quiste había afectado a toda esa zona. Durante todo el procedimiento, la mujer perdió hasta seis litros de sangre.
La cirugía duró unas seis horas y media, durante las cuales la paciente perdió seis litros de sangre. Antes de la cirugía, la paciente pesaba 123 kilogramos y tenía un índice de masa corporal (IMC) de 50,5, lo que la convertía en obesa mórbida. Al final del procedimiento, su IMC era de 28,3.
La paciente permaneció en la unidad de cuidados intensivos durante unos 30 días, durante los cuales sufrió un paro cardíaco e insuficiencia renal aguda. Permaneció en el hospital durante dos meses. Después de dos años, "está completamente recuperada y libre de enfermedades", escribieron los investigadores en su artículo.