Clementa Soria, la zaragozana que donó 1,9 millones a la investigación oncológica tras morir de cáncer
Moderna pone fecha a la vacuna contra el cáncer: "salvará millones de vidas"
Clementa Soria murió en diciembre de 2021 tras ser diagnostica meses antes de un cáncer de páncreas
La maestra decidió donar todo su patrimonio, justo antes de morir, para la investigación contra el cáncer: 1,9 millones de euros
"Estará feliz allí donde esté", dicen las amigas de Clementa Soria, que le dio un sentido a la fortuna acumulada a lo largo de su vida. Cuando en 2021 le detectaron un cáncer de páncreas terminal, reunió a sus amigas para explicarles lo que quería hacer. Donar todo su patrimonio a la Asociación Española Contra el Cáncer. Solo una condición, que el dinero fuera para su comunidad autónoma, Aragón, donde impartió clases de infantil a lo largo de su vida.
Y cómo pudo una profesora tener un patrimonio de 1,9 millones de euros, se preguntarán muchos. Pues invirtiendo con mucho ojo sus ahorros y gracias a una herencia familiar. Sus padres eran agricultores y tenían tierras en la zona de San José de Zaragoza. El pleno boom inmobiliario una constructora pagó por esos terrenos. No veremos su foto, porque Clementa siempre tuvo una virtud: ser discreta. Informativos Telecinco y el diario Nius han hablado con dos de las personas que mejor conocieron a Clementa, Charo García, albacea de Clementa y Amparo Seguí, una amiga de la zaragozana. Ambas, desbordadas por el impacto que ha tenido este gesto de altruismo.
MÁS
Olvido oncológico: los supervivientes de un cáncer claman contra la discriminación por la enfermedad
Desarrollan un chip para la detección "precoz, rápida y barata" del cáncer y enfermedades infecciosas
Doble suerte: una mujer gana 2 millones de dólares en la lotería el día que su hija venció el cáncer en Florida
Sencilla, cercana, una gran persona
Clementa Soria es recordada por sus amigas como una persona "sencilla, amiga de sus amigas y siempre muy cercana. Una gran persona". Amparo Seguí era una de esas amigas, que supo cuál iba a ser su última voluntad, algo que tenía pensado antes de que, paradojas de la vida, un cáncer de páncreas acabara con su vida en 2021. Este hecho solo hizo que todo fuera más rápido. "Lo tenía muy claro", confiesa tanto su amiga como su albacea, Rosario García, quien ha dicho que era "muy meticulosa en sus cosas, superahorradora y sabía muy claro qué, cuando y cómo hacía las cosas". Gracias a su donación se prevé que la supervivencia del melanoma múltiple alcance el 70%, aunque no tenga cura.
Aragón contará con la Unidad de Investigación en Terapias Celulares Avanzadas
Gracias a este legado, Aragón contará con la Unidad de Investigación en Terapias Celulares Avanzadas, un espacio multidisciplinar integrado por personal investigador, médico y técnico específico orientado a la aplicación de nuevos tratamientos de inmunoterapia contra el cáncer mediante células CAR-T y CAR-NK. Estas terapias consisten en modificar células de sistema inmune del propio paciente mediante ingeniería genética con el fin de que actúen de modo selectivo contra la célula tumoral y, por tanto, eliminen la enfermedad. A la infraestructura (una sala con certificación) se destinarán 1,2 millones y al ensayo 700.000 euros.
Hija única, siempre cuidó de sus padres
"Era un placer trabajar con ella" porque era "superorganizada". Ya estaba jubilada y "se dedicaba a sus cosas" pero cuando supo que estaba enferma "tenía muy claro qué quería". Nunca tuvo hijos, ella como maestra de educación infantil tuvo claro que instinto maternal cubierto. Era hija única y siempre se centró en cuidar a sus padres. Eso sí, también recorrió mundo. Australia, Namibia, Tailandia, Argentina, Zimbabue... fueron lugares donde disfrutó de la naturaleza. Aunque donde más disfrutó en su vida fue en esa escuela de infantil, con sus niños. Sí, seguro que Clementa, que luchó contra el cáncer como una jabata, está sonriendo allá donde esté porque su última voluntad, respetada por los que la querían, salvará vidas.