Pablo es uno de esos 20 donantes altruistas que decidieron donar un riñón a alguien que nunca conocerán. Dos de esos buenos samaritanos como Pablo iniciaron sendas cadenas de trasplante renal que beneficiaron a 5 personas cada una. Más de 2.000 donantes hicieron posible 5.300 trasplantes de órganos, 188 de ellos en niños y niñas, y se evitaron casi 300 muertes de personas que no podían esperar más de 48 horas. La donación tras una parada cardiorrerspiratoria, tras la muerte por eutanasia, o a edades avanzadas permiten llegar a más pacientes. Laura fue donante de su hija Sara cuando con año y medio necesitó un trasplante hepático. El trasplante fue vital para que Sara creciera. De eso se cumplen diez años, porque detrás de cada trasplante hay un gesto de solidaridad, de amor al otro y también de vida.
España realizó 15 trasplantes diarios en 2022 hasta alcanzar los 5.383, un 13 por ciento más que el año anterior, una cifra que consolida la tendencia positiva iniciada tras el parón de la pandemia y que roza el máximo histórico que alcanzó antes de su estallido. Igualmente aumentaron un 15 % las personas que dieron uno de sus órganos tras fallecer, un total de 2.196, a las que se sumaron 355 donantes vivos, lo que mantiene a España líder con las tasas más altas del mundo: 46,3 donantes por millón de población (p.m.p), muy por encima de la media europea (19,5), así como 113,4 trasplantes p.m.p.
De acuerdo con el balance anual de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) presentado este jueves por la ministra de Sanidad, Carolina Darias, y la directora general del organismo, Beatriz Domínguez-Gil, el incremento de la actividad se dio en todos los órganos, con 3.402 trasplantes renales (15 % más), 415 de pulmón (15 %); 1.159 hepáticos (8 %), 311 cardíacos (3 %), 92 de páncreas (12 %) y 4 de intestino. Asimismo, destaca la realización de 253 trasplantes en urgencia cero y 188 infantiles. Asimismo, se han trasplantado 153 pacientes renales hiperinmunizados gracias al programa PATHI de la ONT que, con esta cifra, alcanza su máximo histórico.
Todas las comunidades alcanzaron "la excelencia", pero dos superaron ampliamente la tasa nacional de donantes: Cantabria, con 82,8, y Navarra (71,2). Otras cinco rebasaron el objetivo 50 p.m.p -Extremadura, con 60; La Rioja (58,1), País Vasco (56,4), Asturias (55) y Canarias (54,8)-. La más baja, por contra, se dio en Madrid (31,3); Castilla-La Mancha (36,1) y Aragón (37,1).
Una cuarta parte del total de los trasplantes se realizaron con órganos donados en una comunidad diferente y el 7,6 % de los pacientes trasplantados tenían otra autonomía como residencia, lo que da una muestra de "la cohesión" del Sistema Nacional de Salud, ha recalcado la directora general de la ONT.
Más de la mitad de los donantes (55,5 %) fallecieron de un accidente cerebrovascular, y apenas un 4,3 % en un siniestro de tráfico. La edad media del donante español ha subido de los 59 a los 60 años; más de la mitad superaban esa edad, mientras que el 28 % tenía más de 70 y el 5 % más de 80. Ocho de cada diez familias dijeron "sí" a dar los órganos de un ser querido fallecido. Las negativas se situaron así en el 16 %, lo cual "es una demostración de que la generosidad, el trabajo en equipo y la excelente profesionalidad son el éxito del sistema de trasplantes", ha enfatizado la ministra. Domínguez-Gil ha querido valorar otro dato, y es la donación en asistolia, en la que España es el único país en trasplantar todo tipo de órganos y que ha crecido un 38 % con 913 donantes, el 42 % del total.
En 2022, de este modo, se hicieron 1.299 trasplantes renales, 375 hepáticos, 152 pulmonares, 37 cardiacos y 20 pancreáticos con órganos de donantes en asistolia. Uno de ellos fue el primer trasplante mundial de intestino en asistolia a la pequeña Emma, de 13 meses, un hito que repitió unos meses después con Javi, de 3 años. Además, 52 fueron cardíacas, 9 de ellos pediátricas. La mayor parte se ejecutaron en el Hospital Universitario Virgen de La Arrixaca de Murcia (11), seguido del Bellvitge de Barcelona (8) y el madrileño La Paz (7).
Desde que entrara en vigor la ley de eutanasia en junio de 2021, 49 de estos pacientes (42 en 2022) tomaron la decisión de dar sus órganos, que han mejorado la vida de 135 personas. Asimismo, y desde 2013, 173 pacientes con esclerosis lateral amiotrófica (ELA) donaron sus órganos, 43 de ellos el año pasado. Por otra parte, y respecto a los donantes covid, hasta la fecha, 180 pacientes han podido trasplantarse a partir de 84 personas con PCR positiva.
Pese a la recuperación, aún hay un gran número de pacientes en lista de espera: a 31 de diciembre eran 4.746, algo menos que las 4.762 registradas en 2021. La mayoría esperan un riñón (4.404), seguido, muy de lejos, por hígado (317); pulmón (193); corazón (152); páncreas (76) e intestino (4). La lista infantil se ha mantenido en los 66. La mayoría (26) aguardan un riñón o un corazón (20), seguido de un hígado (14), pulmón (4) e intestino (2).
Por otra parte, España realizó 24 trasplantes renales gracias al Programa de Trasplante Renal Cruzado -en el que participan 26 hospitales de 13 comunidades y 22 laboratorios de histocompatibilidad-, en los que se completaron ocho cadenas, dos de ellas de cinco trasplantes iniciadas por otros tantos donantes altruistas. .
Respecto al Plan Nacional de Médula, hasta el pasado 1 de enero estaban registrados 474.455 donantes en el Registro Español de Donantes de Médula Ósea (REDMO), de los que 21.903 se inscribieron en 2022.