Muchas veces, cuando acudimos al supermercado, asumimos que los espárragos son todos de Navarra o los berberechos todos de Galicia. Según CEACCU, la ley no exige que se ponga la procedencia, sólo en caso de ambigüedad. ¿Y quién define la ambigüedad? ¿El empresario? Por eso podemos encontrarnos "auténtica fabada asturiana", y detrás leer: Procedencia, Canadá; o "Berberechos elaborados en las rías gallegas" y que no nos explique de dónde son en su etiqueta. Las asociaciones de consumidores quieren que esto cambie. Hay un producto que ha tenido mucha polémica en este aspecto: la anchoa. Durante 5 años el caladero del Cantábrico permaneció cerrado por un problema de sobreexplotación. El pasado año se reabrió y se augura una buena pesca en los próximos. Entonces no preguntamos: Durante los pasados años cuando comprábamos anchoa del Cantábrico,... ¿era realmente del Cantábrico?
Hemos acudido a una conservera de Santoña, en Cantabria, la cuna de la auténtica anchoa. Nos explican como es el proceso artesanal que llevan realizando durante más de 200 años "la anchoa del cantábrico es única, aquí trabajan muchas personas desde hace décadas, y saben que su trabajo debe seguir un protocolo. Los controles son muy estrictos, el tiempo de maduración, etc" nos explica José Ramón Jaso, de Conservas Silvia.
Una lata de 30 gramos cuesta tres euros, así se diferencia de otras de otros lugares, por el precio. También por su color. La anchoa cántabra es más rojiza, la argentina marrón y las de Chile no son nada flexibles ni jugosas. Un kilo de anchoa fresca se paga en Cantabria a 3 euros, mientras que la anchoa argentina fresca se compra por 0,60 el kilo.
Recuerden, los productos de nuestra tierra son más caros, ni mejores ni peores pero miren siempre el etiquetado y comprueben que si hace alusión a un producto típico tiene que decir si realmente es de la tierra.
Quieres denunciar una situación o enviarnos alguna sugerencia? Contacta con nuestro equipo de Reporteros en los teléfonos 91/395 93 08 - 91/395 95 41 o mándanos un email a reporteros@informativost5.com. Gracias por tu colaboración.