Aun así, son muchos los que están desafiando a las recomendaciones oficiales y se acercan a recoger conchas y pasear por la arena.
Con sus más de 1.500 metros de largo y 150 de ancho, la han bautizado como Shelly Island o 'la isla de las conchas', aunque no es un nombre oficial: las autoridades aseguran que, al igual que ha aparecido de repente, podría desaparecer otra vez bajo las aguas.