Una escapada romántica es una estupenda elección para quien esté buscando la forma de pasar tiempo de calidad con su otra mitad. Encontrar un destino que sea ideal para ambos podría suponer un problema, pero por suerte existen lugares como Alájar, en Huelva, donde no solo se encontrarán un lugar lleno de belleza y encanto, también es un pueblo que promete amor eterno a los enamorados que lo visiten. 

Cualquier destino es una buena idea para los enamorados, al fin y al cabo el objetivo es pasar tiempo juntos, pero si además puedes disfrutar de un lugar donde la gastronomía es estupenda y los alrededores están llenos de vida y energía gracias a lo variado de sus paisajes y naturaleza que lo forma, mejor todavía. En este caso además, las leyendas que rodean a este lugar le da ese extra de romanticismo que ha conseguido conquistar a muchos visitantes. 

En el Parque Natural de la Sierra de Aracena y los Picos de Aroche se encuentra Alájar, un pueblo pequeño, pero cargado de atractivos para captar la atención de quienes paseen por sus calles o sus alrededores. Bosques de encinas y castaños esperan a los amantes de la naturaleza, un contraste interesante con los edificios históricos y calles estrellas, de marcado aire árabe que se encuentra en el pueblo. 

Quienes lo visiten no pueden perderse la ermita Nuestra Señora de los Ángeles, que se encuentra en uno de los lugares más emblemáticos de Alájar, la cima de la Peña de Arias Montano, tampoco pueden dejar de visitar la Iglesia de San Marcos, así como disfrutar de su arquitectura, declarada como Conjunto Histórico Artístico en 1982. 

Cuenta también con lugares donde la naturaleza es la protagonista, por ejemplo, la citada peña de Arias Montano, donde observar yacimientos y restos arqueológicos, las Cuevas de las Lapas, donde se han encontrado restos de la edad de bronce, o el Mirador del Puerto de Alájar, que ofrece unas vistas espectaculares y a una altura de 800 metros. 

No obstante, lo que hace este lugar ideal para las parejas de enamorados es su Arco de los Novios, que se encuentra frente a la ermita de la Reina de los Ángeles. En el pasado, este arco renacentista servía como entrada a los antiguos jardines de Montano. En él hay una inscripción que reza: "Si quieres que tu dolor se torne en alegría, no pasarás pecador sin alabar a María".

Actualmente, además de por su belleza y su historia, se visita por la leyenda que le rodea, porque se dice que si una pareja de enamorados cruza bajo este arco con las manos entrelazadas, su relación acabará en boda con total seguridad. No explica mucho más, ni asegura la felicidad eterna, pero parece una bonita manera de confiar que la relación quedará bendecida si se camina junto a la pareja escogida por este lugar. Un bonito momento que sin duda ninguno olvidará.