La cuenta atrás para la celebración de la gran fiesta de la NFL ha comenzado. Quedan pocas horas para que comience el partido entre los Kansas City Chiefs y los San Francisco 49ers, en lo que será la revancha del encuentro que ya jugaron los mismo equipos en la final de la Super Bowl de 2024 y que se saldó con la victoria del equipo del ala cerrada Travis Kelce. El hecho de que los dos finalistas vuelvan a verse las caras ha provocado una tensión añadida y una máxima expectación, que ha hecho que los precios vinculados al prestigioso evento deportivo se hayan disparado.
Empezando por las entradas de las 65.000 personas que llenarán el Allegiant Stadium de Las Vegas, que no sólo pagarán sus correspondientes tickets, sino que consumirán bebidas y alimentos de forma masiva. Este 2024, la empresa TickPick ha calculado que la entrada media se sitúa en los 9.815 dólares, a diferencia de los 5.678 dólares del 2023. La lista completa de precios es la siguiente: hay pases de 8.188 dólares (los más baratos), de 9.925 dólares, 10.081, 10.160, 10.528 y 12.932, según su ubicación en el estadio. Dentro del mismo, también se llegará a pagar hasta 1,8 millones de dólares por un palco privado de cristal.
En cuanto a los precios ligados a las audiencias de televisión, se espera que el partido supere los 100 millones de espectadores. Esto, sin contar con la locura que ha desatado entre la población americana el romance entre Travis Kelce y Taylor Swift, que hará todo lo posible por estar presente en el estadio, a pesar de tener que dar una tanda de conciertos en Tokio hasta el día 10 de febrero. La estrella estadounidense se ha convertido en todo un amuleto para los Chiefs y, por ello, hasta la embajada japonesa ha tenido que prometer que llegará a tiempo a un partido tan importante para el equipo de su novio.
Swift ha tenido una gran influencia en el aumento de las audiencias de un deporte ya de por sí con un gigantesco fandom, y el coste de los espacios publicitarios se aprovechará de ello. Hasta el año pasado, la revista Forbes calculaba que, cada anuncio de 30 segundos de la Super Bowl, costaba unos 7 millones de dólares. Este 2024, los anunciantes han tirado la casa por la ventana y contarán con personalidades de la talla de Arnold Schwarzenegger, Steve Austin, Tom Brady, Jenna Ortega, Chris Pratt, David y Victoria Beckham, o Leo Messi.
La industria cinematográfica también hará una inversión importante, pues la Super Bowl emitirá 6 tráilers inéditos, entre los que se incluye la gran apuesta de Marvel para la siguiente temporada, Deadpool 3, y otros títulos taquilleros como la segunda parte de 'Del revés' o una nueva entrega de la saga de begins de 'El Planeta de los Simios'. Por supuesto, los honorarios de Usher, el cantante que actuará el intermedio del partido, también formarán parte de ésta, la Super Bowl más cara de la historia.