10 alternativas a las uvas de Nochevieja
La tradición de tomar doce uvas para dar la bienvenida al Año Nuevo es de origen español, pero se está extendiendo a otros países hispanoamericanos
Las aceitunas, gominolas y palomitas son algunas de las alternativas a las uvas por si no te entusiasma la idea de comer esta fruta
Por qué se comen uvas en Nochevieja
La tradición de tomar doce uvas para dar la bienvenida al Año Nuevo y tener buena suerte es de origen español, pero está cada vez más extendida a otros países hispanoamericanos como México, Venezuela, Bolivia, Ecuador, El Salvador, Perú, Colombia, Puerto Rico, Nicaragua o Costa Rica. Además, es uno de los momentos más esperados del año.
Hoy en día ya hay uvas hasta sin pepitas para que no acabemos con la boca llena. También hay quien se pasa los últimos minutos del año pelando sus uvas y quitándoles las semillas para asegurarse de no atragantarse ni tener sustos mientras suenan las campanadas.
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Lo cierto es que no a todo el mundo le gustan las uvas. Cada vez son más las personas que no comen las tradicionales doce uvas en Nochevieja, sea por la razón que sea. Seguro que tienes algún conocido que en lugar de uvas toma frutos secos, golosinas u otro alimento.
Así que si no te entusiasma la idea de comer uvas o si te quieres animar a cambiar de alimento, en NIUS te dejamos diferentes alternativas, tanto dulces como saladas, a las doce uvas de Nochevieja para que puedas continuar con esta popular tradición.
10 alternativas a las uvas
- Aceitunas: es el sustituto más sencillo de las uvas para los que no sean tan aficionados al dulce. Incluso para algunos son más ricas. No obstante, debes asegurarte de que se trate de aceitunas rellenas y sin hueso.
- Gominolas: en el mercado hay de varios sabores, tamaños, formas y colores. Son una buena opción y fáciles de masticar.
- Lentejas: además de ser muy nutritivas, las lentejas son las protagonistas en las tradiciones y rituales de fin de año de países como Italia, ya que las relacionan con la buena suerte.
- Almendras: la única “pega” es que su toque salado puede darte mucha sed si la cena también ha tenido carga de sal. De todas formas, el cava posterior seguro que te ayuda.
- Palomitas: saladas o con mantequilla, tendrás que prepararlas con tiempo. Son una buena opción porque caben en la palma de la mano.
- Lacasitos: los más pequeños suelen optar por estos chocolates tan sabrosos.
- Conguitos: este aperitivo de cacahuete recubierto de chocolate también es uno de los favoritos y más accesibles para tomar en las campanadas.
- Mandarinas: deberán estar peladas y listas para comer con antelación.
- Arándanos: es una opción muy sana. Se trata de una fruta pequeña y fácil de tragar.
- Bebidas: otro clásico entre los clásicos es darle doce pequeños tragos a alguna bebida. El cava es la gran estrella, pero también puedes tirar por un cóctel o por un licor suave.
Cuál es el origen de las uvas
Nos remontamos a la década de 1880 cuando, al parecer, los españoles copiaron la tradición de la alta burguesía francesa de celebrar las fiestas navideñas tomando uvas acompañadas de vinos espumosos. El pueblo de Madrid, que iba a la Puerta del Sol a escuchar las campanadas, empezó a tomar uvas para burlarse de las clases altas y su nueva costumbre.
Más tarde, en 1909, una gran cosecha provocó que los agricultores de Alicante tuvieran un excedente de uva. Es por eso que alguien aprovechó aquella pequeña tradición de unos 30 años antes para hablar de las uvas de la suerte y conseguir que se extendiese por toda España.