A Fernando Alonso se le estaba atragantando Ferrari. No precisamente en la Fórmula 1, más bien en su casa. El piloto más famoso de España, por no decir del mundo, lleva unas semanas en el foco de las subastas porque a principios de junio puso a la venta su Ferrari Enzo en una subasta de MonacoCar Auctions exclusiva de modelos de la marca italiana. Sin embargo, pese al reclamo que podía ser, el asturiano no encontró comprador para su deportivo. Ahora, casi un mes después, ha conseguido comprador.

A principios de junio la casa de subastas confirmó que no había podido vender el Ferrari Enzo sin dar demasiados detalles, aunque todo parecía indicar que ninguna de las pujas llegaba al precio inicial que Alonso había fijado para su coche. La subasta comenzó en 4’2 millones de euros, pero no llegó al objetivo, que se enmarcaba entre los 5 y los 5’5 millones.

Para evitar quebraderos de cabeza al piloto, inmerso en una temporada en la que no le está yendo nada mal, MonoCar Auctions ha mediado en una venta del Ferrari Enzo que ha sido un éxito. Se trata de un comprador que prefiere mantener su identidad en el anonimato, pese a saber que ha pagado 5’4 millones de euros por el deportivo italiano de Fernando Alonso. Un valor que se ha multiplicado infinitamente, ya que hace 20 años, cuando llegó al mercado, su precio era de unos 600.000 euros.

“Conseguir una cifra de venta tan sólida para un vehículo de estas características demuestra aún más nuestra capacidad para lograr precios líderes en el mercado de los mejores automóviles del mundo”, indicó el fundador de MonacoCar Auctions.

De esta manera, el Ferrari Enzo de Alonso supera el precio por que el que otros modelos iguales se han subastado, que en la actualidad lo suelen hacer sobre unos 3 millones de euros, aunque el más caro fue subastado en 2015 por Sotheby’s por 5’6 millones de euros.

¿Por qué el Ferrari de Alonso se ha vendido tan caro respecto a otros similares? La clave está en que el piloto no tenía un modelo normal, sino el Scocca N.1, que cuenta con un chasis número uno de serie limitada de 400 unidades fabricadas entre 2002 y 2004, aunque el asturiano lo compró años después.

A ello se le suma que el coche se encuentra en buen estado y con unas características más que atractivas, como su potencia de 660 CV, un motos V12 o una velocidad que alcanza los 350 kilómetros por hora.