Nadie en el Club Deportivo de Coslada (Madrid) se podía imaginar que Fran, como conocían a Francisco Javier U.P., el entrenador del equipo cadete B masculino, chicos de entre 14 y 15 años, era un fugitivo a quien buscaban por abusos y agresiones sexuales a menores. “El club contaba, con anterioridad a su incorporación, con el certificado que acredita que el entrenador carece de antecedentes de naturaleza sexual, exigido por la normativa vigente”, han informado.

El sábado, antes de comenzar el partido de categoría preferente cadete entre el Coslada y el Rayo Ensanche en el campo del Olivo de Coslada, los agentes de la sección de fugitivos de la UDYCO se presentaron en los vestuarios preguntando por él y se le llevaron esposado delante de padres y niños.

En ese momento, intuyeron que “era algo gordo, muy gordo, pero no nos podíamos imaginar que era por abusos y violaciones de menores”, dijo un miembro de la junta directiva del Club Deportivo Coslada al diario ‘El Mundo’.

El club está en "shock", desconocía la investigación que la Policía Nacional había llevado a cabo a raíz de la denuncia de un menor ajeno al equipo con quien Francisco Javier U.P. habría contactado por redes sociales, mintiendo sobre su edad, y de quien habría abusado.

Así lo aseguran en un comunicado en sus redes sociales publicado tras lo ocurrido: “Se trata de una investigación en curso, cuya iniciación se desconocía, al no haberse comunicado ello ni por el investigado, ni por la policía”.

En el mismo, manifiestan “su absoluto rechazo con conductas que atenten contra la integridad sexual (máxime contra menores de edad)” y aseguran que contaban “con anterioridad a su incorporación, con el certificado que acredita que el entrenador carece de antecedentes de naturaleza sexual, exigido por la normativa vigente”.

El entrenador, que en los últimos tres años había estado en un club de Paracuellos del Jarama y en otro de Torrejón de Ardoz, llevaba en el CD Coslada desde el mes de septiembre y los padres estaban contentos.

“Nosotros no hemos recibido ninguna queja que nos hubiera hecho sospechar; de hecho, me consta que los padres estaban contentos”, dijo el máximo dirigente del club a ‘ABC’.

No obstante, tras tener conocimiento de lo ocurrido, y “aunque los hechos investigados son ajenos al club (al no haberse producido en el seno del mismo) se ha iniciado una investigación interna para analizar lo sucedido, habiéndose puesto a disposición de la Policía y de la Justicia para colaborar en lo que resulte necesario”, reza el comunicado del CD Coslada. 

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