La Policía Nacional ha desarticulado una red internacional que se dedicaba a introducir a migrantes de origen senegalés a través del aeropuerto Adolfo Suárez, haciéndose pasar por menores para solicitar asilo a su llegada a territorio español.
La organización criminal de inmigración clandestina había ideado una sofisticada ruta aérea para introducir de manera ilícita en Europa a personas del país africano. De hecho contaba con un manual en el que se explicaba pormenorizadamente los pasos a seguir para solicitar asilo en España.
Una vez superado el primer escoyo, consistente en llegar desde Senegal hasta la ciudad de Casablanca (Marruecos), los migrantes, siguiendo las instrucciones de la organización, adquirían un billete de avión con destino a diferentes países de Sudamérica.
Estos vuelos tenían como requisito necesario que realizaran un tránsito por el aeropuerto madrileño, aprovechando así nuestro país como puerta de entrada en la Unión Europea. Sin embargo, no querían llegar a su destino final, sino que, aprovechando la ausencia del requisito de visado en tránsito, una vez en España desistían de continuar su viaje.
Tras embarcar en Casablanca con su pasaporte original, los migrantes rompían su pasaporte dentro de la aeronave. A su llegada a España se dirigían a las autoridades policiales manifestando carecer de documentación, ser menores de edad y originarios de países en conflicto como Mali o Etiopía.
Una vez que habían solicitado el asilo, los migrantes, supuestamente menores, no eran retenidas en el aeropuerto mientras se estudiaba su solicitud de asilo, sino que se les trasladaba hasta los centros de primera acogida de la Comunidad de Madrid a efectos de protección.
Los centros de primera acogida gozan de un régimen abierto, por lo que una vez ingresaban en ellos, lo abandonaban sin formalizar su solicitud de asilo. En ese momento, la organización, que contaba con toda una red de recogida y traslado, se ocupaba de ellos a su salida del centro.
Hasta allí acudían diferentes personas en vehículo para trasladarlos a diferentes estaciones de autobuses, aeropuertos, o incluso directamente hasta Francia, Alemania o Bélgica, a cambio de una cantidad económica.
El hecho de que las víctimas de esta red de inmigración clandestina pudieran ser menores de edad alertó a la Fiscalía de Menores de Madrid, quien encomendó unas primeras gestiones de investigación a la Brigada de Extranjería y Fronteras de Madrid y a la Brigada Provincial de Información de Madrid, los cuales demostraron que en ningún caso se tratarían de menores de edad.
En la operación, que ha permitido desarticular la organización criminal, han sido detenidas un total de 12 personas en distintos puntos de la Comunidad de Madrid y Alcoy (Valencia), entre ellas el cabecilla de la red a nivel europeo. La investigación continúa abierta y no se descartan más detenciones.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.