Álex de la Rosa había nacido en Madrid en agosto del año 2000. Le llamaban 'Alexito' y vivía en el distrito de Tetuán. Su familia era originaria de la República Dominicana. Los vecinos conocían a su madre. La describen como una mujer muy trabajadora. También a su hermana, que fue quien bajó corriendo al enterarse de que el chico había sido apuñalado en el corazón, este domingo de madrugada. Yacía en el suelo sobre un gran charco de sangre, a la altura del número 276 de la calle Bravo Murillo.
Los primeros policías que llegaron comenzaron a practicarle maniobras de reanimación hasta que llegaron los sanitarios del Samur- Protección Civil. Tenía un orificio de entrada y otro de salida en el pecho, a la altura del corazón, ocasionado con un arma blanca. Le practicaron una toracotomía in extremis, pero no fue posible salvarle la vida.
A su lado, había otro joven dominicano de 21 años con una brecha en la cabeza. Fue estabilizado y trasladado al hospital 12 de Octubre. Los dos eran miembros de los Trinitarios, la banda juvenil predominante en el barrio.
En el lugar sus amigos han colocado unas velas y flores a modo de altar improvisado. También han atado varias bandanas, con un significado: el verde representa a esta tribu urbana, el morado a los caídos y el blanco, el rojo y el azul a la bandera de los ideales cristianos diseñada por Juan Pablo Duarte, concebida y aprobada como bandera dominicana por Los Trinitarios el 16 de junio de 1838, un símbolo de la independencia.
Los investigadores de Homicidios y de la Brigada Provincial de Información de la Policía Nacional buscan ahora a los autores. Según los testigos, los agresores serían un grupo de siete jóvenes con los que se cruzaron de forma fortuita. Las víctimas habían estado en varios locales de copas con otros amigos pero sobre las 4:30 de la madrugada se habían quedado solos.
Todo hace pensar que podrían ser miembros de una banda rival a los que ya conocían de antemano, posiblemente de los Dominican Don't Play (DDP), sus mayores enemigos. Varias personas llamaron al 112 para alertar de que se estaba produciendo una reyerta multitudinaria.
Los atacantes salieron corriendo al ver llegar las primeras patrullas. Los agentes realizaron una inspección ocular y trataron de localizar el arma homicida, que no ha sido recuperada.
Una vez realizado el levantamiento del cadáver, el cuerpo fue trasladado al Instituto Anatómico Forense de la Ciudad de la Justicia, situada en Valdebebas, donde van a practicarle la autopsia. Ahora van a analizar las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de la zona e interrogar a los testigos.
Álex vivía en la Calle Navarra, muy cerca del lugar del homicidio. Había sido detenido varias veces por la Policía Nacional, que le tenía fichado en el escalafón medio del coro de los Trinitarios de Tetuán.
La primera vez que le arrestaron fue en septiembre de 2020, por allanamiento de morada. En marzo de 2021 volvieron a ponerle los grilletes, acusado de cometer un robo con violencia.
En febrero de 2022 fue detenido en dos ocasiones: una por tenencia ilícita de armas y otra por una agresión sexual. Quedó en libertad, aunque le impusieron como medida cautelar la retirada de pasaporte y prohibición de salida del territorio nacional.
El 31 de mayo la Policía Nacional detuvo al máximo responsable del coro del distrito de Tetuán junto a otros tres jóvenes de entre19 y los 22 años y un menor de edad después de que atacaran a otro pandillero que quería abandonar la banda cuando se encontraba en un bar de copas situado en la calle Marqués de Viana, ocasionándole semiamputaciones en los dos brazos y profundas heridas en las piernas.