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El Servicio Público de Limpieza Urgente (SELUR) entra en funcionamiento este jueves 1 de septiembre en Madrid con unas nuevas 'patrullas antigrafitis'. Con ellas, la ciudad quiere que no quede rastro de las pintadas vandálicas en el municipio.
Estas patrullas no solo responderán a los avisos de la ciudadanía para eliminar las pintadas, sino que revisarán de manera periódica las zonas de los distritos donde su aparición es habitual, para proceder a su limpieza.
José Luis Martínez-Almeida, ha presentado el nuevo servicio en la plaza del Dos de Mayo, en el distrito Centro, uno de los escenarios que más sufre la actuación de los grafiteros, acompañado por el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante.
Allí, el alcalde ha destacado que las nuevas actuaciones incorporadas “permitirán responder con mayor agilidad, rapidez y eficiencia ante las diferentes necesidades de limpieza de la capital” y, en concreto las ‘patrullas antigrafitis’, posibilitarán “una respuesta más rápida y eficaz ante esta forma de vandalización”.
El presupuesto del contrato del SELUR de Madrid se ha multiplicado por 2,5 con 23 millones de euros, de los que casi 6 millones se destinarán para la eliminación de pintadas vandálicas en las calles de la ciudad.
Este aumento del presupuesto ha redundado en las exigencias del Ayuntamiento al concesionario: más medios personales y materiales. Así, la plantilla para todo el SELUR se eleva en 156 puestos de trabajo (69,3%), alcanzando una total de 381 puestos.
Hasta ahora, la limpieza de grafitis en Madrid se realizaba con una plantilla común para todos los servicios, atendiendo a las necesidades del día y bajo la planificación de la Dirección General de Servicios de Limpieza y Residuos. El SELUR solo actuaba cuando había que eliminar pintadas alusivas, amenazantes o de alarma social contra personas e instituciones.
Las nuevas ‘patrullas antigrafitis’, formadas por 55 operarios en los turnos diarios y de fines de semana, intensificarán la limpieza de estas pintadas de una forma homogénea y eficiente, indistintamente de su temática y sobre un mayor número de tipos de materiales vandalizados.
Así, todos los avisos relacionados con pintadas serán atendidos por el SELUR. El Área de Medio Ambiente y Movilidad que dirige Carabante crea doce equipos exclusivamente dedicados a retirar los grafitis de avisos ciudadanos en un plazo de 7 días desde la recepción del aviso, mientras que en el caso de pintadas de grafitis alusivas, se procederá a su eliminación en menos de 3 horas.
Además, estas ‘patrullas’ revisarán cada 25 días las zonas con mayor proliferación de grafitis y para aquellas zonas donde los grafitis son habituales pese a su retirada, se ha estipulado una periodicidad de una vez cada 45 días.
En Madrid se realizaron 42.994 servicios de limpieza en 2021 para eliminar las pintadas vandálicas, proyectadas sobre 167.693 metros cuadrados de fachadas de edificios, una media de 118 actuaciones diarias. El coste medio del Ayuntamiento de Madrid para acabar con los grafitis superó los 2 millones de euros.
Además, durante el pasado año se interpusieron 185 denuncias por la realización de grafitis. En diciembre de 2019, se elevaron las sanciones, que en los casos mas graves pueden llegar a los 3.000 euros.