La Lotería de Navidad es un evento que está lleno de anécdotas, y la guinda del pastel la han puesto un grupo de amigos que hacían cola ataviados con dos bolas gigantes de lotería, un décimo y dos uniformes de las niñas de San Ildefonso, el famoso colegio que canta los números en este sorteo navideño, tal y como informa el portal web 20 Minutos.
Los agentes de seguridad del Teatro Real se han visto obligados a requisar estos disfraces, ya que los atuendos no entraban por el detector de metales debido a su gran tamaño. Finalmente, tras resignarse, Jorge, que acudió con sus amigos con muchas ganas de disfrazarse, accedió al interior del edificio con ropa de calle.
Algo que llama la atención del disfraz de décimo es que rezaba el número 42442, cifra que solo se ha vendido en Villares del Saz, el pueblo de Cuenca de apenas 500 habitantes del que venía esta comitiva.