El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha insistido este viernes en que no se puede predecir cuánto durará la guerra y ha asegurado que el fin de la contienda depende, "lamentablemente", de las acciones que tomen sus socios occidentales. El líder de Ucrania ha llegado a afirmar que estaría dispuesto a hablar con Vladimir Putin para poner fin a esta guerra.
"Nadie hoy puede predecir cuánto durará esta guerra. Pero estamos haciendo todo lo posible para liberar nuestra tierra rápidamente. Esa es nuestra prioridad, trabajar todos los días para que la guerra sea más corta", ha asegurado el mandatario ucraniano en su comunicado diario dirigido a los ciudadanos ucranianos.
Así, el presidente de Ucrania ha agradecido a todas las personas que están trabajando para fortalecer las sanciones contra Rusia y para aumentar el apoyo financiero y armamentístico de Ucrania. "Esta es la única receta para defender la libertad frente a la invasión de Rusia", ha añadido.
Zelenski ha recordado a sus socios europeos y a Estados Unidos que cada día de guerra supone "un aumento de las amenazas globales" y una "nueva oportunidad" para que Rusia provoque inestabilidad en otras partes del mundo.
Por otra parte, el presidente ucraniano ha detallado que 37 países han reanudado su trabajo en Kiev, un hecho por el que se ha mostrado agradecido. "Estas son 37 pruebas de que Ucrania se mantiene fuerte y tiene perspectivas en contraste con la Federación Rusa. Estoy seguro de que otras misiones extranjeras regresarán pronto a la capital", ha expresado.
También ha animado a las empresas ucranianas a reanudar sus operaciones en las "áreas seguras" y a proporcionar puestos de trabajo que se ajusten a la actividad económica de las "condiciones existentes".