El abogado Ben Crump, conocido por representar varios casos de ciudadanos afroamericanos sometidos al abuso policial, como el de George Floyd, cuya muerte a manos de la policía de Minesota provocó una oleada de protestas por todo EEUU, ha comunicado que presentará una demanda contra la ciudad de Cayo Hueso, Florida, después de difundir un vídeo en el que un agente arresta a un niño de 8 años con discapacidad.
La madre del menor con discapacidad, Bianca Diegennaro, presentará la demanda contra la ciudad de Cayo Hueso, el distrito escolar del condado de Monroe y los agentes a cargo del arresto de su hijo. Crump, abogado de la familia, divulgó el vídeo del arresto, que se produjo hace dos años, donde se puede observar al policía ponerle las esposas al niño con dificultad a causa del tamaño de sus muñecas.
"Pese a que no significaba ninguna amenaza para los agentes ni para el personal de la escuela, el menor fue puesto en el asiento trasero de un vehículo policial, llevado a un centro de detención y acusado del delito de agresión. Con 3,5 pies de alto (1,07 metros) y 64 libras (29 kilos) de peso, este pequeño no representaba peligro para nadie", señaló Crump.
El niño, según explicó el abogado, pese a que estaba en un Programa Individualizado de Educación, IEP, porque padece discapacidades, fue dejado a cargo de una profesora sustituta que "no sabía o no le preocupaban" las necesidades especiales del menor. Según el letrado, la maestra forzó a moverse al menor donde ella quería, por lo que este respondió con agresividad. La maestra, entonces, llamó a la policía, que amenazó al niño con entrar en prisión.
"Es un ejemplo angustioso de cómo nuestro sistema y nuestras políticas educativas entrenan niños para ser criminales tratándolos como criminales. Si es condenado este niño, será un criminal convicto a los 8 años", añadió Crump.
El vídeo también ha sido publicado por el letrado en redes sociales, donde los usuarios han mostrado su rechazo. Algunos preguntaban dónde estaba la ayuda terapéutica al menor, en vez de la opción policial de recluirlo en el centro de detención del condado.