La OMS rebaja los temores al respecto de la letalidad de la variante sudafricana del coronavirus. Según ha comunicado la responsable de la unidad técnica anticovid de la Organización Mundial de la Salud, Maria Van Kerkhove, no han hallado hay evidencias de que sea más mortal que otras.
Del mismo modo, señalan, las investigaciones tampoco apuntan a que existan indicios de que cause mayor número de casos graves o sea más difícil de diagnosticar.
Por el contrario, a lo que sí se señala es a una mayor transmisibilidad, al igual que sucede con la variante británica: "Sí se ha identificado un aumento en la capacidad de contagio, parecida a la que observamos con la variante del Reino Unido", ha admitido Van Kerkhove.
Del mismo modo, otro apunte negativo que ha hecho al respecto es el relacionado con las vacunas y su eficacia frente a esta variante, explicando que, según los estudios realizados, las elaboradas por los fabricantes Johnson & Johnson, Novavax o AstraZeneca tendrían una menor eficacia.
No obstante, a este respecto la OMS introduce matizaciones, y es que la directora del Programa de Inmunizaciones de la organización, Kate O'Brien, señala que concretamente el ensayo clínico que se realizó con la vacuna de AstraZeneca durante el periodo de circulación de esta variante se llevó a cabo con un número reducido de pacientes y no incluyó a nadie que hubiera enfermado gravemente de covid-19. "Esto es importante, porque lo que estamos viendo es que todas las vacunas suelen ser más efectivas con personas que presentan cuadros severos", ha señalado.
Además, las expertas subrayan que, pese a las diferencias de la variante con respecto a otras cepas, Sudáfrica ha demostrado que con las medidas de salud pública adecuadas puede ser controlada.