Muchos países han decidido no usar la vacuna contra el coronavirus de AstraZeneca con las personas más jóvenes debido a los trombos. Es el caso de España, por ejemplo. Otros como Dinamarca, han dejado de usar el antídoto de Oxford por completo. La pregunta es: ¿qué harán los países con las dosis que ya no van a usar?
Dinamarca ya no podrá a sus ciudadanos los 2,4 millones de dosis de vacuna de AstraZeneca que tiene compradas porque dice tener la epidemia de coronavirus bajo control y por precaución tras confirmarse un "riesgo conocido de efectos adversos graves".
Muchos países de su entorno ya han mostrado interés por esas vacunas. República Checa se ofreció para comprar todas las vacunas AstraZeneca de Dinamarca, según informa BBC. Estonia, Letonia y Lituania también han mostrado interés.
"Tenemos menos vacunas que personas dispuestas a vacunarse", ha dicho la primera ministra lituana, Ingrida Simonyte.
También en un tuit, el ministro del Interior checo, Jan Hamacek, informó que había dado instrucciones para negociar la "compra todas las vacunas AstraZeneca de Dinamarca".
Desde la OMS, el director para Europa, Hans Kluge, ya ha dado a entender que Dinamarca estaba tratando de vender o donar las vacunas de AstraZeneca que no va a usar.
"Entiendo que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Dinamarca está listo, o ya está buscando opciones, para compartir las vacunas de AstraZeneca con países más pobres", ha comentado Kluge. Sin embargo, el Ejecutivo danés no se ha pronunciado al respecto.
Hay dudas sobre los sueros de otras farmacéuticas, no solo de AstraZeneca. Por ejemplo, la vacuna de Janssen. La Agencia Europea del Medicamento ( EMA) admitió ayer la posibilidad del trombo como efecto adverso, no obstante, como con la fórmula de Oxford, entiende que los beneficios son mayores que los riesgos.
EEUU, donde ha habido 8 trombos entre más de 7 millones de vacunados, aún no ha decidido qué hacer con la vacuna de Janssen, la única monodosis hasta ahora y de la que tiene más de 100.000 millones. Todo apunta a que el viernes autorizará su uso.
De momento, más del 20% de las vacunas entregadas aún no se han administrado en estados como Alabama (37%), Alaska (35%), Vermont (27%) y Carolina del Norte (24%), según bbc.
La vacuna de Johnson & Johnson también ha sido suspendido en Sudáfrica, donde había sido elegida por su mayor protección contra la variante local del covid. Antes había hecho lo mismo con la de AstraZeneca, de la que vendió un millón de dosis a distintos países de su continente.
Otras veces, ocurre como en Suecia, que admite haber tirado cientos de dosis de la vacuna de AstraZeneca después que las personas citadas rechazaran ponerse este suero por miedo a los trombos.
Las vacunas deben ser administradas en unas horas desde que se sacan de la nevera y si el paciente citado no acude, a veces, explican las autoridades de Gotemburgo y Estocolmo, el personal sanitario no encuentra a otra persona que pueda acudir inmediatamente a inocularse. Suecia solo pone el suero de Oxford a mayores de 65 años.
Covax es una plataforma internacional dirigida por la OMS e integrada por la Alianza Global para Vacunas e Inmunización (GAVI, por sus siglas en inglés) y la Coalición para las Innovaciones en Preparación para Epidemias (CEPI).Su objetivo es distribuir vacunas contra el covid de los países ricos – que las vendan o donen- a los pobres.
Su propósito es que a final de este año se hayan entregado más de 2.000 millones de dosis contra el coronavirus en 190 países.
España es uno de esos países que ha cerrado acuerdos comerciales que suponen la adquisición del doble de vacunas que de población. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha avanzado en público en alguna ocasión que se darán a países que lo necesiten.
Lo cierto es que la mayoría de países ricos ha comprado más vacunas de las que necesita. Sin embargo, de momento, están priorizando inmunizar a su población. Solo algunos han abonado fondos a Covax.
La organización admite que aún no hay información concreta sobre qué país recibe qué vacuna.