El ministro de Sanidad de Alemania, Jens Spahn, ha confirmado los planes del Gobierno para implantar la vacunación obligatoria contra el sarampión, a raíz de la publicación de datos que revelan una menor inmunización en ciertos sectores de población.
"No importa cómo se calcule, sigue siendo lo mismo: demasiados niños en Alemania están en peligro innecesariamente, porque muy pocos niños están vacunados contra el sarampión", ha alertado el ministro.
En su opinión, los seguros médicos pueden ayudar con campañas de información y de coordinación con escuelas. "La vacunación debe formar parte de la vida cotidiana porque la vacunación salva vidas", ha subrayado.
La firma de seguros Barmer concluyó en un reciente análisis que la tasa de vacunación para enfermedades infecciosas como el sarampión, las paperas o la rubéola se ha mantenido en Alemania por debajo del 90 por ciento.
A partir de marzo de 2020, los padres tendrán que demostrar que sus hijos han sido vacunados antes de que puedan ser admitidos en un centro educativo. La obligatoriedad también se aplicará a cuidadores de niños, personal de guardería, maestros y empleados médicos, según una medida que plantea multas de hasta 2.500 euros.