El productor de Hollywood Harvey Weinstein y el equipo directivo de su estudio de cine, declarado en bancarrota en marzo del 2018, estarían ultimando los detalles de un acuerdo que podría acabar con muchos dolores de cabeza del empresario cinematográfico. 25 millones dólares (unos 22 millones de euros) a cambio de poner fin a las demandas por abuso sexual presentadas contra Weinstein por más de 30 actrices y varias de sus antiguas empleadas. Este pacto extrajudicial resolvería todas las demandas presentadas desde 2017 contra el productor de cine y su antigua empresa.

El acuerdo, que se está terminando de definir, no exige que el productor de cine admita ninguna irregularidad en su comportamiento y debe ser firmado por ambas partes. En el caso de seguir adelante, el pago de la indemnización deberá ser abonado por su aseguradora y aprobado por un juez.

La noticia ha sido publicada por el diario New York Times que cita como fuentes a los abogados que forman parte de la negociación. Estos 22 millones de euros forman parte de un acuerdo general previo de más de 42 millones de euros destinado a finiquitar las obligaciones de la compañía de Harvey Weinstein.

De este paquete general, 12 millones de dólares (10.768.512 euros) irán destinados a cubrir los costes legales de Harvey, su hermano Bob y los de otros ex directivos de su compañía. Dieciocho de las presuntas victimas se dividirán 6.2 millones dólares, sin que ninguna de ellas pueda recibir más de millón. Además, se reservarán $18.5 millones para posibles demandantes que puedan unirse en los próximos meses. Con este acuerdo se pondría fin a casi todas las demandas en contra del productor y de su antigua empresa, a la que se acusa de haber sido testigo de los hechos y no hacer nada al respecto. Esto es solo en cuanto a los litigios civiles, en la causa penal, todo sigue su agenda.

Me TooCuando este verano Harvey Weinstein quiso cambiar de equipo legal por tercera vez, él mismo le prometió al juez que ha instruido hasta ahora su causa que no volvería a solicitar un aplazamiento de su proceso. Pero lo cierto es que la cita judicial fue retrasada del 9 de septiembre al 6 de enero de 2020.

A pesar de que sus abogados lo nieguen, Harvey no parece tener ningunas ganas de sentarse en el banquillo de los acusados. Pero si todo sigue su curso, la próxima cita ante el juez será el día de Reyes. Harvey ha asegurado que se presentará ante la Corte Suprema de Nueva York a pesar de sus problemas de espalda, que parecen ir a peor. Este miércoles lo vimos llegar a la sala con un andador y prácticamente no podía caminar erguido. Asegura que pasará por el quirófano antes de que se celebre el juicio. Su presencia en la corte fue para que el juez aumentara su fianza después de que los fiscales lo acusaran de querer romper el monitor que lleva en el tobillo.

Se espera que el juicio se alargue durante dos meses, y durante este tiempo escucharemos testimonios claves como el de la actriz Anabella Sciorra, a quien seguramente la Fiscalía llamará como uno de sus testigos.

Harvey se enfrenta a cadena perpetua por presuntamente asaltar sexualmente a dos mujeres. A una de ellas la habría violado en un hotel de Manhattan en el año 2013, y a otra, le habría forzado a realizar un acto sexual en el 2006. El trabajo de la Fiscalía será demostrar que estas afirmaciones son ciertas.

De su boca siempre hemos escuchado que es inocente, pero lo cierto es que él ha sido el detonante del movimiento Me Too. Una ola de denuncias por abuso sexual llevadas a cabo por más de 70 mujeres que aseguran haber sufrido abuso sexual por parte del productor durante varios años. Entre las víctimas, nombres tan famosos como Salma Hayek, Car Delevigne, Rose McGowan, Angelina Jolie, o Gwyneth Paltrow.

Ninguna de ellas se encuentra entre las mujeres que han llegado a un acuerdo, pero su fama ha hecho que este movimiento llenara las portadas de medios de comunicación de medio mundo. Algo que los abogados han utilizado a favor de su defendido. Aseguran que existe un juicio público paralelo de su cliente por la cobertura mediática del caso. La defensa ha solicitado que la causa legal, que contará con un jurado, se juzgue fuera del distrito de Manhattan y así garantizar un proceso justo.