La UE advierte a los jóvenes del riesgo de quedar "atrapados" en contratos precarios

  • Aconseja usar nuevas formas de empleo flexible tienen "efectos positivos potenciales

Los Veintiocho han alertado este miércoles del creciente riesgo de que los jóvenes en Europa acaben "atrapados" en el futuro en contratos precarios mal pagados y han subrayado la necesidad de que los jóvenes adquieran competencias de nivel superior todavía.

"En el futuro puede haber un aumento de las formas más flexibles de contratación de empleados" que suelen afectar a "los jóvenes, en particular a aquellos con menos oportunidades", según han avisado los responsables de Juventud de la Unión Europea en unas conclusiones sobre las perspectivas de empleo futuras para los jóvenes, adoptadas en el marco del Consejo de Educación y Juventud en Bruselas.

Así, los Veintiocho admiten que para los jóvenes "hay un mayor riesgo de quedar atrapado en empleos temporales de ingresos bajos, con escasa cobertura de protección social y reducida probabilidad de mejora profesional" aunque también subrayan que las nuevas formas de empleo flexible tienen "efectos positivos potenciales para la distribución de la fuerza laboral y el bienestar personal de aquellos que adoptan un modo de vida 'freelance'".

"Los que abandonan de forma temprana la escuela y los jóvenes de baja educación seguirán siendo vulnerables previsiblemente en el contexto laboral en el futuro", avisan en el texto, en el que alertan de que se espera que las disparidades salariales entre los trabajadores de cualificación baja y media aumenten y haya posibles problemas de pobreza laboral.

Aunque el porcentaje de jóvenes de entre 15 y 29 años que ni estudian ni trabajan, los conocidos como ninis, ha caído al 13,4% en 2017 desde el 15,9% en 2012, la UE advierte de que siguen siendo "muy" vulnerables y prometen que seguirán recibiendo el respaldo de la Garantía Juvenil, para garantizar que los jóvenes encuentren un empleo o prácticas o sigan formándose a los cuatro meses de quedarse en paro o acabar su educación.

Los Veintiocho reconocen que los jóvenes ven su futuro laboral "con miedo o incertidumbre" y piden que "el trabajo decente" se considere como "una aspiración legitima" de los jóvenes.

En el caso de las capacidades digitales, defienden que las competencias no deben centrarse únicamente en "dominar las nuevas tecnologías, sino también en el entendimiento de cómo pueden ayudar a influir en la sociedad".

"Todos los jóvenes europeos, incluidos aquellos con menos oportunidades, deben tener acceso a una educación formal e informal inclusiva y de calidad que mejorará su abanico completo de competencias", reclaman en el texto, en el que también subrayan la importancia de garantizar una transición "tranquila" de la escuela al trabajo y entre empleos, así como facilitar el empleo de los jóvenes.