El presidente estadounidense, Donald Trump, ha revelado este lunes que lleva semana y media tomando hidroxicloroquina, un potente medicamento antipalúdico cuya eficacia contra el coronavirus no está demostradaeficaciano está demostrada científicamente.
Trump ha explicado que consultó con un médico de la Casa Blanca si podía tomar la medicina, pero le dijo que no estaba recomendada para él, ya que no había dado siquiera positivo por coronavirus. "Le pregunté qué pensaba. Me dijo: 'bueno, si quieres'. Le dije 'sí, quiero tomarla'", ha relatado el propio Trump en declaraciones a la prensa.
El mandatario está tomando esta medicina de forma preventiva junto con un suplemento de zinc basándose en las buenas opiniones de los sanitarios que están combatiendo la epidemia del coronavirus en primera línea y que han utilizado la hidroxicloroquina.
"Aquí está mi prueba: me llegan muchas llamadas positivas" sobre este medicamento. "Hasta ahora parece que está bien", ha indicado Trump. "Les sorprendería cuánta gente la está tomando antes de coger (el coronavirus), en particular los trabajadores de primera línea. Estoy tomando hidroxicloroquina ahora mismo", ha añadido.
La noticia de que el presidente estadounidense está tomando hidroxicloroquina ha provocado inquietud y escarnio por parte de expertos y presentadores de televisión porque podría animar a otras personas a tomar esta medicina que tiene potentes efectos secundarios.
"Si eres población de riesgo y lo tomas como tratamiento preventivo para evitar el virus (...) y eres población vulnerable, te puede matar", ha apuntado el presentador de Fox News Neil Cavuto.
En marzo y abril Trump defendió el uso de la hidroxicloroquina como tratamiento contra el coronavirus a pesar de que son escasas las pruebas de que tiene efectos positivos. Trump destacaba entonces que los pacientes "no tienen nada que perder" tomando esa medicina e incluso sugirió su uso de forma preventiva.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos ha autorizado el uso de cloroquina en pacientes con coronavirus, aunque solo bajo prescripción médica porque podría causar graves problemas cardiacos. La medicina suele utilizarse en casos de malaria o para tratar el lupus.
Estados Unidos es de largo el país con más casos de coronavirus confirmados, 1.504.386, y ha informado de 90.194 muertes y 283.178 recuperados de esta nueva enfermedad.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha informado al director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, de que el país norteamericano hará permanente la congelación de fondos a la organización y "reconsiderará" su pertenencia a la misma en 30 días si no realiza "mejoras sustanciales" en el marco de la pandemia del coronavirus.
"Le informo de que si la OMS no lleva a cabo mejoras sustanciales importantes en los próximos 30 días, haré permanente mi congelación temporal de la financiación de Estados Unidos a la OMS y reconsideraré nuestra pertenencia a la organización", ha indicado Trump en una carta, dirigida a Tedros, que ha difundido a través de su cuenta de Twitter.
"No puedo permitir que los impuestos de los americanos continúen financiando una organización que, en su estado presente, claramente no sirve a los intereses de Estados Unidos", ha agregado.
Mediante la misiva, el presidente norteamericano ha concretado que, a su juicio, la OMS ha fallado en la respuesta que ha proporcionado del Covid-19 y ha remarcado la "alarmante falta de independencia" del organismo de Naciones Unidas respecto a China, país en el que se originó el nuevo coronavirus.
"Está claro que sus repetidos pasos en falso y los de su organización respondiendo a la pandemia han sido extremadamente costosos para el mundo", ha señalado el mandatario estadounidense en la carta, en la que muestra una cronología de las acciones llevadas a cabo por la OMS desde diciembre de 2019.
"La única manera en la que la OMS puede avanzar es si, de hecho, demuestran independencia respecto a China", ha agregado, antes de avisar que "se necesita una acción rápidamente". "No tenemos tiempo que perder", ha aseverado.
En este contexto, el presidente ha acusado a la OMS de "ignorar" las "creíbles" informaciones que apuntaban a la propagación del coronavirus en Wuhan a principios de diciembre de 2019 "o incluso antes", incluyendo reportajes aparecidos en la revista médica 'The Lancet'.
En cuanto a la transmisión de persona a persona, Trump ha criticado que las autoridades taiwanesas informaron a la OMS de la misma el 31 de diciembre pero, "la OMS eligió no compartir nada de esta información crítica con el resto del mundo, probablemente por razones políticas".
En referencia a China, Trump ha rechazado que las autoridades del país asiático "no informaron" a la OMS del riesgo de salud pública en el período marcado por las Regulaciones Internacionales de Salud, de 24 horas, y no lo hicieron hasta el 31 de diciembre, según la carta, que consta de cuatro páginas.
Por otra parte, el mandatario estadounidense ha asegurado que la OMS ha pronunciado "repetidamente" afirmaciones sobre el coronavirus que eran "groseramente inexactas o engañosas". Ha ejemplificado sus palabras con que, por ejemplo, el 21 de enero, el presidente chino, Xi Jinping, "según los informes, presionó" a Tedros para que "no declarara el brote de coronavirus como una emergencia".
Según Trump, Tedros, al día siguiente "le dijo al mundo que el coronavirus no planteaba una emergencia de salud pública de preocupación internacional".
El presidente de Estados Unidos también ha criticado que Tedros "fracasó" al intentar que China admitiera recibir en el país a un comité de expertos médicos internacional de la OMS. "Como resultado, este equipo crítico no llegó a China hasta el 16 de febrero (...) e incluso después no se permitió al equipo visitar Wuhan hasta los últimos días de su visita". "Notablemente, la OMS guardó silencio cuando China negó a los dos miembros americanos del equipo el acceso completo a Wuhan", agrega Trump.
"Durante toda la crisis, la OMS ha insistido curiosamente en alabar a China por su transparencia", ha apuntado el presidente estadounidense, que se ha mostrado muy duro al afirmar que, cuando la OMS "finalmente" declaró el virus como una pandemia el 11 de marzo, "ya había matado a más de 4.000 personas e infectado a más de 100.000 en 114 países de todo el mundo".
La Administración de Donald Trump se ha mostrado especialmente crítica con la influencia de China sobre la OMS y con el papel jugado por la organización en la pandemia del Covid-19. A mediados de abril, Trump anunció su decisión de suspender la financiación a la OMS al tiempo que ha acusado a la organización de "encubrimiento" del coronavirus.
Este mismo lunes, el secretario de Sanidad estadounidense, Alex Azar, ha aprovechado su participación en la Asamblea Mundial del organismo dependiente de Naciones Unidas para acusar a la organización y a China de falta de transparencia sobre el coronavirus.
Por su parte, Xi ha defendido al inicio de la cita la gestión de la pandemia llevada a cabo tanto por su país como por el organismo de la ONU y ha recalcado que Pekín ha hecho "todo lo que estaba en su mano" para ayudar a otros países a hacer frente a la crisis.