El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ha ordenado a las autoridades italianas que ofrezcan un alojamiento temporal a diez niños gitanos afectados por el desalojo de un campamento en la localidad de Giugliano, lo que ya ha sido respondido con burlas por parte del ministro del Interior, Matteo Salvini.
El alcalde de Giugliano, una localidad cercana a Nápoles, ordenó el desalojo del campamento por razones de salud pública, lo que se tradujo en una intervención de las fuerzas de seguridad cinco días después. La medida afectó a 450 personas de origen romaní, en su mayoría procedentes de Bosnia.
El TEDH se ha pronunciado a raíz de una denuncia presentada por tres de los afectados y ha instado a Italia a proporcionarles de forma "interina" un alojamiento. Entre los afectados figuran dos mujeres y sus respectivos hijos, diez en total de entre dos y 16 años, según el comunicado de la corte, en el que se reclama también la suspensión de cualquier otro desalojo.
Salvini ha reaccionado a través de Twitter, desde donde ha cuestionado que el tribunal europeo quiera "obligar" a Italia a "dar casa" a los gitanos.
"Ahahahahah. Motivo de más para votar a la Liga el domingo", ha apostillado, en alusión a las inminentes elecciones al Parlamento Europeo, para las que la formación ultraderechista parte como favorita.