Las autoridades vietnamitas han enviado a los detectives británicos los nombres de 14 de las personas que creen que murieron en el camión frigorífico localizado la semana pasada en Essex, Inglaterra, para comenzar el proceso de identificación formal de las víctimas. Asimismo, la Policía que investiga la trágica muerte de las 39 personas ha enviado a Vietnam los nombres de cuatro personas cuyas identidades creen haber confirmado.
Estas 39 personas se embarcaron en un peligroso viaje, a merced de las mafias de tráfico de personas, con la esperanza de aspirar a una vida mejor, pero terminaron en la parte trasera del contenedor del horror. Los nombres de las nueve presuntas víctimas confirmadas son Nguyen Huy Hung, de 15 años; Pham Tra My, de 26; Hung Nguyen, de 33; Anna Bui Thi Nhung, de 19; Nguyen Dinh Tu, de 26; Le Van Ha, de 30; Vo Ngoc Nam, de 28; Joseph Nguyen Dinh Luong, de 20; y Hoang Van Tiep, de 18, según informa 'Daily Mail'. Muchos de sus familiares han sido intimidados por las organizaciones de inmigración ilegal para que no hablen con las autoridades, y a algunos se les ha prometido que le devolverían parte de la tarifa de contrabando, pero todos ellos tienen una historia que merece ser contada:
Anna Bui Thi Nhung, de 19 años, pagó a un agente más de 10.000 euros con la esperanza de llegar al Reino Unido para trabajar como técnico de uñas, según un familiar. Nhung y muchos otros del distrito de Yen Thanh, a unos 200 kilómetros al sur de Hanoi, viajan al extranjero buscando ganar el dinero que no pueden ganar en su país. Su objetivo era ganar lo suficiente como para que sus familias construyan casas que de otro modo no podrían pagar.
El 21 de octubre, días antes de que su familia perdiera el contacto con ella y surgiera la noticia del contenedor de envío condenado, Nhung escribió en una publicación de Facebook: "crecer significa tener que ocultar tu tristeza en la oscuridad y mantener una sonrisa en tu rostro".
La familia de Nhung ha explicado que su viaje al extranjero comenzó en agosto. Primero fue a China, antes de llegar a Alemania y luego a Bélgica, donde creen que abordó el camión predestinado. "Solo quiero una vida pacífica", escribió Nhung en una leyenda debajo de una foto de ella sonriendo en un campo verde unas semanas después de salir de Vietnam. A última hora del sábado por la noche, la familia de Nhung, sin esperanza, instaló un altar en su memoria, con su foto junto a la de su padre.
La viajera 'VIP' que pagó 34.700 euros a los traficantes creyendo que viajaría a Gran Bretaña en avión y automóvil y envió mensajes desgarradores a su madre cuando murió en la parte trasera del camión del horror. Pham Thi Tra My, de 26 años, le envió a su madre una serie de mensajes desgarradores diciéndole que la "amaba" y que estaba "muriendo porque no podía respirar" en los momentos previos a su muerte, afirmó su familia.
Tra My procede de Ha Tinh, una provincia empobrecida en una parte de Vietnam de donde llegan muchos de los inmigrantes ilegales del país. Sus padres aseguraron que fue "muy doloroso" recibir el mensaje de texto, porque sabía que iba a morir cuando lo envió. "He perdido tanto a mi ser querido como a mi dinero", dijo el padre de Pham. Los contrabandistas no les dijeron cómo transportarían a su hija al Reino Unido. "Dijeron que esta era una ruta segura, que la gente iría en avión, automóvil ... si hubiera sabido que ella iría por esta ruta, no la habría dejado ir", agregó el padre.
El hermano de Tra My le contó a la BBC que su hermana les había dicho que no la contactaran porque 'los organizadores' no le permitieron recibir llamadas. Una trabajadora de derechos humanos en Vietnam, que ha hablado con la familia de Tra My, reveló que hizo el peligroso viaje porque su familia estaba endeudada y estaba tratando desesperadamente de ayudarlos. "Es muy triste que ella corriera el riesgo porque estaba lidiando con una deuda creada por otro hombre de la familia", añade esta fuente anónima.
Nguyen Dinh Luong, de 20 años, pagó 11.500 euros por el viaje a Gran Bretaña desde Francia, donde vivía ilegalmente desde 2018, y planeaba trabajar en un salón de manicura cuando llegara a suelo británico. Su padre, Nguyen Dinh Gia, le contó a The Associated Press que no había podido comunicarse con él desde la semana pasada. Había dicho que se uniría a un grupo en París que intentaba llegar a Inglaterra. 'Le dije que podía ir a donde quisiera siempre que fuese seguro. No debía preocuparse por el dinero, yo me encargaría de eso", agregó.
Su hijo dejó su hogar en la provincia central de Ha Tinh para trabajar en Rusia en 2017, y luego fue a Ucrania. En abril de 2018 llegó a Alemania y posteriormente viajó a Francia.
Nguyen Dinh Tu, de 26 años, tenía esposa y un hijo pequeño. Trabajaba ilegalmente en Rumanía, pero cace unos meses le pidió a su mujer que lo ayudara a recaudar 12.700 euros para cubrir el coste del viaje de Alemania al Reino Unido.
"Perdí el contacto con él el 21 de octubre", dijo su mujer con lágrimas en los ojos. "Tengo una gran deuda que pagar, no tengo esperanza ni energía para hacer nada". El padre de Tu manifestó que unos familiares en el Reino Unido le habían dicho que Tu estaba dentro del camión y que tenían planeado recogerle. "Se suponía que debían recogerlo en el punto de entrega, pero llamaron y dijeron que Tu estaba en esa camioneta", dijo el padre de Tu.
Vo Ngoc Nam, de 28 años, es padre de dos hijos y había llamado el mismo martes 22 de octubre a su mujer para decirle que estaba en el camión que se dirigía a Gran Bretaña. Le pidió que llamara a sus padres y rezaran por él, pero no volvieron a tener noticias desde entonces.
El padre de Nam, Vo Ngoc Luyen, contó que "después de leer sobre las 39 personas en el contenedor en el Reino Unido, mi familia está extremadamente conmocionada. Estamos esperando ansiosamente la información oficial de las autoridades". Al parecer, Nam había viajado a Rumanía, Alemania y Francia para encontrar trabajo.
Hoang Van Tiep, de 18 años, es una de las víctimas más jóvenes del furgón del horror. Probablemente murió junto con su primo Hung Nguyen. Tiep se fue de su casa hace dos años después de que su familia obtuviera un préstamo de 15.600 euros para pagar su viaje a Rusia y luego a Francia. Había dejado a su familia en Yen Thanh para arriesgar su vida al ingresar al Reino Unido.
Hoag le dijo a su pare que viajaría en taxi al Reino Unido. La familia había recaudado 20.200 euros para pagar a los traficantes de personas que llevarían al adolescente a suelo británico.
Hung Nguyen, de 33 años, trabajaba en Francia como lavaplatos antes de emprender su viaje a Gran Bretaña. Su familia pagó a las mafias 15.500 euros el año pasado para llevarle a Francia, y le habían exigido una cantidad similar la semana pasada. Hung se reunió con su primo Hoang Van Tiep para la etapa final del viaje y se teme que hayan muerto juntos.
Se teme que el carpintero y expolicía Le Van Ha haya muerto sin haber conocido a su hijo de tres meses. El joven de 30 años dejó a su esposa embarazada y a sus dos hijos pequeños en junio, cuando viajó a Turquía, luego a Grecia y después a Francia en su camino a Gran Bretaña.
Los familiares dijeron que su viuda, Tran Thi Hoa, de 29 años, sufría conmoción después de que ella se enteró de que estaba desaparecido cuando los funcionarios le pidieron una fotografía para ayudar con la identificación. Su padre dijo que Ha quería enviar dinero a su familia, para liquidar los 26.600 euros pagados a los traficantes de personas y otro préstamo de 7.600 euros para construir la casa de su familia.
El adolescente Nguyen Huy Hung, de 15 años, sería la víctima más joven de la tragedia del camión de Essex. Su objetivo era reunirse con sus padres, y para ello se había pasado los dos últimos meses intentando el viaje al Reino Unido. Si bien su muerte no ha sido confirmada por la policía británica, los familiares se temen lo peor. Su hermano mayor, de 16 años, que vive en Corea, escribió en Facebook que "mi hermano dejó Francia para irse al Reino Unido y no hemos podido contactarlo desde entonces".
Se cree que los padres, que presumiblemente se encuentran de forma ilegal en el Reino Unido, habían pagado a los traficantes de personas al menos 11.500 euros para organizar el pasaje para su hijo menor. Perdieron contacto con él el 22 de octubre, el día de la tragedia.