Reino Unido, forzado a participar en las elecciones europeas ante el bloqueo del brexit

  • El Gobierno, resignado a unos comicios que querían evitar

  • Los ciudadanos están llamados a las urnas el 23 de mayo

  • Nigel Farage, favorito de cara a las europeas

Theresa May quería evitarlo desde el primer momento. Lo repitió en sucesivas ocasiones, pero el clima de división en el Parlamento Británico ha llevado al Gobierno a tener que resignarse y admitir que Reino Unido concurrirá a las elecciones europeas a la espera de un acuerdo 'in extremis'. La falta de consenso para ratificar el acuerdo de salida de la Unión Europea ha dejado al Ejecutivo de Theresa May sin tiempo para evitar unos comicios que no habrían tenido lugar si el brexit se hubiese ajustado al plazo inicialmente previsto, es decir, al 29 de marzo; la fecha estipulada para culminar la ruptura.

No ha sido así, y de prórroga en prórroga, la última petición aceptada por Bruselas autoriza a Reino Unido a permanecer hasta el 31 de octubrepermanecer hasta el 31 de octubre; un plazo que, por su parte, Theresa May no quiere agotar, para lo cual sigue negociando con el Partido Laborista en busca desenquistar una situación de desacuerdo que parece interminable.

Llamados a las urnas el 23 de mayo

Así las cosas, ha sido David Lidington, ‘número dos’ del Ejecutivo el que ha reconocido la situación, explicando que los ciudadanos británicos tendrán que volver a las urnas el 23 de mayo, el primero de los cuatro días en los que los europeos de los 28 países que integran la Unión Europea están llamados a elegir a sus respectivos representantes en la Eurocámara.

No obstante, la esperanza del Gobierno de Reino Unido es que los eurodiputados británicos “no lleguen a tomar posesión de sus escaños”, y por ello, con este propósito, Lidington llama a “redoblar esfuerzos” para ratificar ese acuerdo de retirada que nunca llega antes del 1 de julio, fecha exacta en la que se constituye el Parlamento Europeo.

Nigel Farage reclama protagonismo en medio del caos político

En este clima de fragmentación, desacuerdo y falta de consenso, con la líder del Partido Conservador incapaz de materializar la salida de la UE forma ordenada y cumplir sus objetivos, en medio del caos político la figura de Nigel Farage, antiguo líder del UKIP, emerge situándose precisamente como favorito de cara a las próximas elecciones europeas encabezando el Partido del Brexit, fundado por él mismo. Según los sondeos, quedaría por delante de laboristas y conservadores, que ocuparían respectivamente la segunda y tercera posición.