Policías y manifestantes chocaron anoche a las puertas de Downing Street durante una protesta contra las restricciones, y eso que en el Reino Unido no son tan estrictas comparadas con las de otros países europeos.
Quizás por eso, los contagios se han disparado en los últimos días, sobre todo en Inglaterra. Así que el secretario de Salud no descarta nuevas restricciones, mientras de que el alcalde de Londres decretaba la situación de incidente grave.
Eso le da más herramientas para afrontar en la capital británica el alarmante aumento de las hospitalizaciones, agravado por la falta de sanitarios, de baja por contagios.
Con más de 82.000 nuevos casos en la última jornada, 12.000 de ellos por la variante ómicron, la situación británica espanta además a otros países europeos.
Tras el veto de Francia a los viajes desde el otro lado del Canal de La Mancha, Alemania ha incluido al Reino Unido en la lista de zonas de alto riesgo.
Las autoridades de Reino Unido han notificado este domingo más de 82.000 nuevos contagios por coronavirus, más de 12.000 de los cuales han sido atribuidos a la nueva variante ómicron, récord desde su aparición en el país y otros 45 fallecimientos en las últimas 24 horas.
Los 82.886 nuevos contagios elevan el total de afectados a 11,3 millones, mientras que el número de fallecidos es de 147.218, informa el Ministerio de Salud británico en su página web. Más de 900.000 británicos han recibido ya su dosis de refuerzo, para un total de 28 inyecciones adicionales desde el principio de la campaña, según el balance.
Esta situación llevó el sábado al alcalde de Londres, Sadiq Khan, a declarar el estado de alerta en la capital británica, mientras que este domingo el ministro de Salud, Sajid Javid, ha declarado a Sky News que el Gobierno todavía no contempla nuevas restricciones pero estaría dispuesto a hacerlo "con los datos en la mano".