La rehén de Lieja entra en escena respondiendo a dos preguntas: eres musulmana? Sí, lo soy. Haces Ramadán? Sí, lo hago. A las respuestas de la limpiadora le siguieron un 'no te voy a hacer daño'. Todo ocurrió en la puerta de este instituto que Darifa intentó cerrar al oir los tiros. Fue imposible. Lo tenia en frente. La llevó hasta la ventana. Para que la policía supiera que tenía una rehén. Estado Islámico confirma estar detrás. No sirvió para nada, titula la prensa belga, el informe que alarmaba sobre él. Ahora han detenido a su hermano para saber si contó con ayuda. 'Arranca mamá' fueron las últimas palabras de Ciril en el semáforo rojo. Una bala entró en su cabeza. Cuantas más balas mejor, buscaba el yihadista. 'Voy a cocer a tiros a los agentes' dijo a la rehén antes de salir del instituto donde hoy han vuelto a clase. Entonces la policía acabó con su vida.