El desplome en la afluencia a las manifestaciones convocadas por el 'presidente interino' de Venezuela, Juan Guaidó, alerta a la oposición sobre su capacidad para forzar la salida del poder del mandatario del país Nicolás Maduro, pese a los esfuerzos realizados en esta dirección.
La oposición convocó el jueves a una marcha masiva, la tercera manifestación respaldada por Guaidó esta semana, tras una convocada por las enfermeras y otra por los maestros. La afluencia fue de algunos cientos de personas.
"Creo que hay apatía, creo que hay decepción y que falta estrategia", ha opinado Lizabeth Ball, una profesora de 56 años de la Facultad de Medicina de la Universidad Central de Venezuela (UCV), parada el jueves entre un centenar de jóvenes en una plaza del campus, en una marcha convocada por la dirigencia estudiantil y apoyada por Guaidó.
Guaidó gozaba de una popularidad de más del 60 por ciento a principios de año, cuando invocó una serie de artículos de la Constitución para declararse presidente interino del país y calificara la reelección de Maduro en mayo de 2018 de "fraude", tras lo cual parte de la comunidad internacional ha desconocido a Maduro como presidente.
En aquel momento, Guaidó dio a los opositores de Maduro renovadas esperanzas de que era posible que el izquierdista abandonara el poder y se convocaran nuevas elecciones.
La popularidad de Guaidó, quien ha reconocido la molestia de la gente ante el infructuoso intento de cambiar al Gobierno, cae desde finales de abril y actualmente se ubica en un 42,1 por ciento, según la firma encuestadora Datanálisis.
No obstante, el mismo sondeo señala que la popularidad de Maduro ha ido en picada hasta llegar al 15,5 por ciento, mientras su nivel de rechazo alcanza un 81,5 por ciento. El mandatario, de 57 años, mantiene el apoyo de la cúpula castrense, algo que ha demostrado ser vital para el sucesor de Hugo Chávez.
Así, el grupo de colaboradores de Guaidó sostiene que las manifestaciones de esta semana deben ser destacadas. "Nuestro balance es absolutamente positivo", ha afirmado un asesor de Guaidó que pidió no ser identificado. "Estamos reactivando la movilización como un elemento fundamental de la presión contra la dictadura", ha continuado.
La dirigencia estudiantil también se mostró positiva pese a la discreta afluencia. "Mermó la convocatoria y nosotros lo sabemos, pero el mensaje también es para todos los venezolanos, que necesitamos de ellos", ha señalado a Reuters Estefanía Cervo, una dirigente estudiantil de la UCV de 22 años que acompañó la marcha universitaria del jueves.