Las protestas en Bogotá contra la brutalidad policial, surgidas tras la muerte del abogado Javier Ordóñez durante una intervención policial, cumplen este viernes tres días consecutivos, movilizaciones en las que en esta jornada también se han registrado disturbios aislados.
El Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) de Colombia ha hecho uso de bombas aturdidoras y gases lacrimógenos para dispersar a una multitud de unas 70 personas que han intentado incendiar el Comando de Acción Inmediata (CAI) de la Policía Nacional de Villa Luz, donde Ordóñez murió como consecuencia de una paliza sufrida en su interior, según la investigación de la Fiscalía.
La situación, no obstante, ya se encuentra controlada, aunque algunos ciudadanos han denunciado que algunos agentes de Policía se han dado la vuelta a la chaqueta del uniforme y han atacado a los manifestantes, ha informado el diario local 'El Espectador'.
En otro punto de la movilización, los manifestantes han lanzado objetos contra el CAI de Teusaquillo, han roto sus cristales y han rayado la fachada. Sin embargo, hasta el momento, no se han registrado heridos de gravedad durante esta tercera jornada de protestas.
Las protestas, que también han incluido movilizaciones pacíficas y velatorios, han estado acompañadas por actuaciones violentas en las que, según ha informado la alcaldesa de la ciudad, Claudia López, la Policía ha utilizado armas de fuego para contener a los manifestantes, a pesar de indicarse a los uniformados abstenerse de su uso.
El último balance de fallecidos durante las manifestaciones que recogen los medios se sitúa en 13, mientras que más de 400 personas --209 civiles y 194 policías-- han resultado heridas. Además se han registrado diversos actos vandálicos, como la quema de CAIs y autobuses.
López ha asegurado que "lo sucedido es una auténtica masacre con los jóvenes" de Bogotá, al tiempo que ha desvelado que, además de los fallecidos, se han recibido 119 denuncias por agresiones procedentes de los agentes de Policía. "Hay 72 heridos de bala en 48 horas, es lo más grave que ha pasado en Bogotá desde la toma del Palacio de Justicia", ha afeado, según recoge 'El Espectador'.
La mandataria se ha reunido con el presidente de Colombia, Iván Duque, y el procurador Fernando Carrillo para entregarles grabaciones que muestran "con claridad" a miembros de las fuerzas de seguridad "disparando indiscriminadamente en diferentes barrios de la ciudad". "Policías uniformados ocultando su uniforme o presuntos miembros de la Policía de civiles disparando", ha sentenciado.
En este contexto, López ha solicitado una reforma estructural de la Policía para evitar que casos similares ocurran en el futuro. Sin embargo, según ella, Duque no lo considera necesario. En concreto, López ha reclamado que la Policía sea un organismo civil que no tenga formación militar y que responda ante la ciudadanía y la justicia ordinaria. La Procuraduría, por su parte, sí se ha mostrado abierta a esta posibilidad. "En Nariño la descartan, pero en la Procuraduría no", ha dicho.
Por otra parte, López ha convocado un acto de reconciliación y perdón para este domingo. "Bogotá necesita un acto de reconciliación, perdón, enmienda que reconstruya la confianza que es la base de la autoridad", ha considerado.
La Procuraduría ya ha anunciado que investigará los presuntos abusos cometidos por los miembros de la Policía Nacional durante las dos últimas jornadas de protesta, después de que López así lo haya solicitado.
Así, ha pedido al director de la Policía, el general Gustavo Moreno, un inventario detallado que incluya las actas oficiales de la munición, tipo de arma de fuego y aquellas no letales, y explosivos utilizados por la fuerza pública el miércoles y jueves.
El informe también debe contener una identificación de cada agente que usó munición, además del lugar donde prestaba servicios. Por último, ha solicitado una copia de los informes de los sucesos en los que personas resultaron heridas o muertas, la relación de las actuaciones ordenadas y el estado en el que se encuentran.
Por su parte, Duque ha trasladado que, en las últimas horas, más de 140 personas han sido detenidas por presuntamente estar involucradas en "hechos vandálicos". "Esperamos un proceso de judicialización y sanción efectiva", ha dicho Duque durante una intervención desde Casa Nariño, afirmando que el Ejecutivo materializará "las deportaciones que sean necesarias".
Además, ha informado de que ha contactado con algunos familiares de las víctimas y miembros de la Policía de Colombia heridos. Tras ello, ha insistido en "rechazar cualquier expresión de violencia que afecta tanto a ciudadanos como a miembros de las fuerzas" de seguridad.
Por último, ha reconocido la actitud "gallarda" de la Policía de Colombia, que ha apartado a los dos agentes involucrados en la detención de Ordóñez y ha suspendido a otros cinco con el objetivo de avanzar en las investigaciones del caso.
Ordóñez, de 42 años, falleció el martes después de una polémica intervención policial en la zona de Engativá. Un vídeo muestra el uso de pistolas táser contra este hombre, que pide auxilio y reclama que no se le apliquen más descargas eléctricas.
Investigadores de la Fiscalía colombiana han concluido que murió como consecuencia de una paliza sufrida en el interior del CAI de Villa Luz, según un vídeo que posee. En estas instalaciones habría sufrido varios golpes y, según los investigadores, los impactos recibidos en la cabeza terminaron costándole la vida