Kate McLaughlan no quería ni bombones ni flores de sus alumnos por Navidad. Los profesores suelen recibir regalos de sus alumnos por Navidad pero este año esta profesora de Port Glasgow, en Escocia, ha pensado que era una buena idea que los regalos fueran para otras personas que realmente los necesitaran.
Así, decidió mandar una carta a los padres sugiriéndoles que quienes quisieran hacerle un regalo, por favor, optaran por hacer una donación a un banco de alimentos. Así, los chicos aprenderían el verdadero sentido de la Navidad. “He pensado aprovechar esta oportunidad para continuar con el tema de la responsabilidad social”, reza en la carta.
La profesora les dio un sobre a cada niño y les pedía a los padres que, quien quisiera participar, hiciera una donación anónima. En clase reunirán el dinero y harán una compra online para un banco de alimentos.