La Policía de Reino Unido ha informado este miércoles de que ha hallado un alijo de cocaína valorado en 1 millón de libras (1,2 millones de euros) escondido en un cargamento de mascarillas en una furgoneta en el túnel del Canal de la Mancha.
El Ministerio del Interior británico informaba en un comunicado que la cocaína se encontraba "escondida en una caja de mascarillas que ha sido incautada por los agentes" en el Eurotúnel, que une Francia con Reino Unido.
"Las redes criminales están tratando de explotar el brote de coronavirus para su propio beneficio, pero la Fuerza Fronteriza y la Agencia Nacional contra el Crimen de Reino Unido (NCA) están trabajando juntos para detenerlos", ha indicado el Ministerio en un mensaje difundido en su cuenta de Twitter.
El autor de los hechos se trata de un hombre de procedencia polaca de 34 años que ya ha sido detenido por los agentes. Al conductor del vehículo se le han incautado 14 kilogramos de cocaína que tenía previsto llevar a territorio británico, según informaciones del diario local 'The Guardian'.
La Policía le ha requisado, además, las mascarillas, que serán sometidas a los "controles" pertinentes por parte de las autoridades, tal y como ha explicado Ian Hanson, director de la Fuerza Fronteriza en la localidad gala de Coquelles.
Además, en nuestro país era detenido el pasado lunes un hombre en Madrid al que la Policía Municaipal le incautó más de 11 kilos de hachís en su coche. El detenido alegó que salió de su domicilio para comprar comida a unos familiares suyos de avanzada edad.
Según informaron los agentes, el arresto se produjo en el distrito Moncloa-Aravaca, mientras se encontraban realizando un control estático de vehículos con motivo de las medidas impuestas por el estado de alarma ante la pandemia del coronavirus.
Los agentes de seguridad comprobaron que en el vehículo del detenido no había ningún bulto o bolsa de la compra y al ser preguntado por la policía, el conductor se puso nervioso y contestó de manera contradictoria. Tras esto, los agentes registraron el vehículo encontrando en su interior una maleta de tela con multitud de paquetes envueltos en plástico de color marrón y blanco, desprendiendo un fuerte olor a hachís. Un perro detector de droga acudió al lugar de los hechos para hacer un registro más exhaustivo.
El total de la droga incautada alcanzó un peso de 11,650 kilos, repartidos en 115 placas de hachís. El hombre fue detenido y conducido hasta dependencias policiales y el vehículo fue trasladado por la grúa municipal.