El pasado 20 de febrero, el vuelo DZ6297 de la compañía Donghai Airlines cubría su ruta habitual entre la ciudad de Nantong en la provincia de Jiangsu y Xian en la provincia de Shaanxi. Todo transcurría según lo previsto hasta que, apenas 50 minutos antes del aterrizaje, todo comenzó a torcerse.

Tal y como apuntan los testigos, el incidente, que más tarde desembocaría en una gran pelea a bordo, comenzó porque un pasajero que viajaba en clase preferente quiso utilizar el aseo en el que se encontraba el capitán de la aeronave. El piloto, que hacía uso del lavabo minutos antes de retomar el control manual del vuelo, hizo saber al pasajero a través de la puerta que debía esperar sentado en su asiento.

Al salir camino a la cabina, el primer oficial se dio cuenta de que el pasajero había hecho caso omiso a sus indicaciones y que permanecía aún apostado a la puerta aguardando su turno para utilizar el váter. Fue entonces cuando comenzó el incidente.

Tras comprobar el poco éxito que sus palabras habían tenido para conseguir que el pasajero regresara a su asiento, el piloto, enfurecido, se dirigió a uno de los asistentes de vuelo con los que contaba la tripulación aquel día y expresó su malestar sugiriendo que no estaban haciendo bien su trabajo. El azafato, ofendido, negó la veracidad de las acusaciones del piloto y pronto comenzó un intercambio de insultos que acabaría en pelea.

Tal y como informa el Sounth China Morning Post , la pelea se saldó con un brazo roto por parte del asistente de vuelo y la pérdida de un diente en el caso del piloto. Ambos trabajadores han sido suspendidos con efecto inmediato según un comunicado de la compañía en la red social china weibo.

Después de que el vídeo del incidente se hiciese viral en las redes sociales chinas, la aerolínea tuvo que salir rápidamente al paso mostrando su preocupación por lo ocurrido y anunciando una investigación para mejorar el servicio "llevando a cabo una rectificación de seguridad integral".

El incidente de Donghai, sin embargo, no es un caso aislado, este año se han producido momentos de tensión a bordo de aviones de pasajeros que, en ocasiones, han derivado también en altercados que acaban viralizándose en redes sociales. Un habitual del pasado 2020 fueron los casos de pasajeros que se negaban a ponerse correctamente la mascarilla provocando la irritación del resto de viajeros. Sin embargo, este motivo de disputa no se produce exclusivamente en los aviones ya que es cada vez más habitual encontrarnos con peleas en torno a la correcta utilización de este producto sanitario que hemos tenido que incorporar a nuestras vidas.