Miles de paquetes abiertos o dañados permanecen desparramados por las vías del tren en el este de Los Ángeles, sin posibilidad de que lleguen a su destino, al menos a corto plazo. Según Adam Rodríguez, trabajador del ferrocarril, los paquetes fueron robados de los trenes por ladrones. Compañías como UPS, Amazon o FedEx han advertido sobre el incremento de robos en trenes.
"Ellos asaltan los vagones, rompiendo las cerraduras de plástico que no son muy sólidas", asegura Rodríguez, que además explica que les da igual que el tren esté en marcha, cogen lo que quieren y van lanzando la mercancía a las vías. Entre los paquetes hay incluso test de antígenos y suministros médicos.
La compañía ferroviaria Union Pacific lleva meses advirtiendo de la fiscal de Los Ángeles sobre el incremento de los robos y esgrime que lo facilita el cambio en el procesamiento de los delitos menores. En los últimos tres meses la policía de Los Ángeles han realizado más de 100 detenciones de ladrones de trenes, que fueron puestos en libertad a las 24 horas.