La muerte de Abú Saad Orakzai es la tercera de un líder de esta rama del grupo afgano, abatido en ataques de Estados Unidos desde julio de 2016.
El comandante de las fuerzas de la OTAN y Estados Unidos en el país, Scott Miller, ha subrayado que EEUU y sus aliados están en Afganistán para mantener su presión sobre los terroristas transregionales y en red que intentan planificar, financiar y llevar a cabo ataques desde aquí".
"Esto es sólo parte del trabajo de la coalición hacia una solución de seguridad en Afganistán, pero es una parte vital", ha argumentado en en comunicado, publicado en su página web por la 'Operación Apoyo Decidido'.
Las autoridades de Afganistán, por su parte, han anunciado este lunes la muerte de otros siete presuntos miembros del grupo yihadista en operaciones militares realizadas en la provincia de Kunar (este).
El 201º Cuerpo Silab en el Este ha explicado que las operaciones fueron llevadas a cabo por tierra y aire en el distrito de Suki, tal y como ha recogido la agencia afgana de noticias Jaama Press. Además , ha informado que en las operaciones, que se han saldado con otros tres heridos, han participado efectivos del Ejército, la Policía y los servicios de Inteligencia del país.
El grupo yihadista tiene una importante presencia en Nangarhar, donde el Ejército y las fuerzas estadounidenses han aumentado sus operaciones en un intento por evitar su expansión en la zona.
El Gobierno afgano ha informado de la muerte de decenas de presuntos yihadistas en numerosos bombardeos llevados a cabo por Estados Unidos y el propio Ejército del país durante los últimos meses.