Una granja de animales exóticos al sur de China. Ese es el lugar de origen más probable del coronavirus según la investigación que hizo la Organización Mundial de la Salud (OMS) a principios de año en Wuhan. Lo harevelado Peter Daszak, presidente de la EcoHealth Alliance y uno de los miembros de la expedición que viajó hasta China durante una entrevista con NPR de la que se hace eco Efe.
El grupo de científicos de la OMS encontró pruebas de que las granjas de animales exóticos estaban abasteciendo al mercado de Huanan, en Wuhan, epicentro de la pandemia del coronavirus. "Creo que el SARS-CoV-2 primero contagió a personas en el sur de China. Parece que fue así”, señala Daszak.
Según el experto, la rápida reacción del Gobierno chino para cerrar esas granjas tras conocer los primeros casos de esta enfermedad es una muestra de que la más probable vía de transmisión del coronavirus fue algún tipo de animal salvaje criado en cautividad en el sur de China y de ahí pasó a humanos.
De hecho, Daszak, junto con otros expertos del equipo que visitaron China, apuntan al murciélago como el animal que incubó por primera vez el coronavirus SARS-CoV-2 y que, además, provenía de la provincia meridional de Yunnan o de la vecina Birmania.
“Esas granjas toman animales exóticos como las ginetas, los puercoespines, los pangolines, los mapaches o las ratas del bambú para que se reproduzcan en cautividad”, explicó el zoólogo británico durante la entrevista.
"China cerró las granjas porque en febrero de 2020 pensaba que era la vía más posible de contagio. Y en el informe de la OMS, creemos también que es la vía más probable”, añadía Daszak sobre los resultados de esta investigación en China. Ahora la clave será determinar qué animal hizo de puente entre los murciélagos y los humanos y qué granja, de las muchas que se promovieron en el sur de China.
El informe de la OMS, con todas las conclusiones que se han podido sacar después de mandar a su expedición de expertos a Wuhan a principios de este año, será publicado en las próximas semanas. Un documento que dará nuevas ideas sobre el origen de esta pandemia que ya ha matado a más de 2,6 millones de personas en todo el mundo.
La misión que visitó China cree que en diciembre de 2019 el coronavirus estaba más extendido de lo que se pensaba en la provincia de Wuhan. El director de esa misión, Peter Ben Embarek, declaró que los científicos chinos presentaron a la misión 174 casos de coronavirus registrados en Wuhan y sus alrededores y que fueron reportados en diciembre de 2019, de los cuales 100 fueron confirmados a través de laboratorio y los restantes por diagnóstico clínico del paciente.
Agregó que esta mayor cantidad de casos, probablemente casos graves, descubiertos por los médicos chinos desde el principio, podría significar que la enfermedad afectó a más de 1.000 personas en Wuhan en ese mes de diciembre. "El virus circulaba ampliamente en Wuhan en diciembre, lo cual es un hallazgo nuevo", aseguró Embarek, a su regreso de la misión de cuatro semanas en el país asiático para investigar el origen del virus.