En las afueras de la localidad eslovena de Sevnica, ciudad natal de Melania Trump, se erige desde el pasado 28 de junio una estatua de tamaño natural que pretende rendir homenaje a su vecina más universal: la esposa del presidente de EEUU.
La obra, esculpida a golpe de motosierra, muestra a la primera dama vestida con el traje azul con el que acudió a la toma de posesión de su marido. El pretendido homenaje a Melania ha provocado las risas y la mofa en Eslovenia. Casi nadie se atreve a elogiar el resultado de la obra, llevando camino de convertirse en el nuevo "Ecce Homo" esloveno.