Violentas protestas sacudieron Santiago, capital de Chile, la madrugada de este sábado con cócteles molotov y botes de gas lacrimógeno volando por los aires tras una marcha pacífica en la que se estima participó alrededor de un millón de personas.
Es una de las manifestaciones más grandes jamás vistas en la historia del país. Al caer la noche hubo enfrentamientos entre agentes antidisturbios de la Policía y algunos manifestantes. Las protestas en Chile comenzaron el viernes pasado por un aumento en las tarifas de transporte público.
Aunque al final el Gobierno de Sebastián Piñera, presidente del país, desoyó estas demandas y por lo tanto se acabaron convirtieron en disturbios, incendios provocados y saqueos. Diecisiete personas han muerto, algunos de ellos manifestantes, cientos de personas han resultado heridas y más de siete mil chilenos han sido detenidos.
El ejército de Chile se ha hecho cargo de la seguridad en Santiago, una ciudad de 6 millones de personas, que ahora se encuentra en estado de emergencia con toques de queda nocturnos mientras 20,000 soldados patrullan las calles.