Un informe publicado este martes ha revelado que 9.000 niños murieron en orfanatos para madres solteras de Irlanda entre 1922 y 1998, una cifra que incluye a las tres cuartas partes de todos los niños nacidos o admitidos en una de estas instalaciones en un año durante la Segunda Guerra Mundial.
El trabajo, elaborado por la Comisión de Hogares Maternoinfantiles irlandesa, ha agregado que, en total, el 15 por ciento de los aproximadamente 57.000 niños que se encontraban en las 18 instituciones investigadas murieron durante su estancia allí.
La "muy alta tasa de mortalidad infantil" durante el primer año de vida de los bebés en los orfanatos "es probablemente el rasgo más inquietante de estas instituciones", ha señalado el documento, recogido por el diario 'The Irish Times'.
Asimismo, muestra que, entre 1945 y 1946, "las tasas de mortalidad entre los niños" en los orfanatos "fue casi el doble de la media nacional de los niños 'ilegítimos'". El término 'ilegítimo', que se refiere a los niños nacidos de madres solteras, se utilizó en Irlanda hasta 1987.
El informe, de unas 3.000 páginas, menciona algunos orfanatos en particular. Así, en el de Bessborough, ubicado en Cork, el 75,1 por ciento de todos los niños que fueron admitidos o nacieron allí en el año 1943 murieron en su infancia.
No obstante, la tasa de mortalidad más alta de todos los orfanatos es la de Sean Ross, ubicado en Ros Cré, que estuvo operativo entre 1931 y 1969. Un total de 1.090 niños de los 6.079 que vivían allí entre 1932 y 1947 fallecieron, un porcentaje del 79 por ciento.
"Sean Ross tiene una incidencia mucho mayor de mortalidad por enfermedades infecciosas graves, como difteria o fiebre tifoidea, que cualquier otro orfanato", puntualiza el texto, que atribuye esta circunstancia a que las madres eran transferidas a un hospital para gente febril, --"donde trabajaban como enfermeras sin remunerar"-- y luego volvían a Sean Ross, donde al parecer transmitían las infecciones a sus hijos.
En sus conclusiones, el trabajo hace hincapié en que los orfanatos "no salvaron" las vidas de los niños 'ilegítimos' antes de 1960. De hecho, censura, "parece que redujeron significativamente sus posibilidades de sobrevivir". Las tasas de mortalidad infantil no solo no sólo eran públicas, sino que "eran conocidas por las autoridades nacionales y locales de la época y registradas en publicaciones oficiales", remacha.
El primer ministro de Irlanda, Micheál Martin, ha indicado que el informe describe un capítulo "oscuro, difícil y vergonzoso de la historia irlandesa reciente", donde "una cultura extraordinariamente opresiva" trató a las mujeres "excepcionalmente mal".
A juicio del mandatario irlandés, el trabajo presenta a una sociedad irlandesa con "profundas preguntas". Así, ha destacado que ninguna "potencia extranjera" obligó a la población irlandesa a realizar estas acciones. "Nos hicimos esto a nosotros mismos", ha censurado, subrayando que "toda la sociedad fue cómplice de ello".
Por su parte, el ministro de Infancia, Roderic O'Gorman, ha apuntado a la "brutal cultura misógina" de lo sucedido. "El informe deja claro que, durante décadas, Irlanda ha mantenido una cultura misógina opresiva y brutal, donde la estigmatización generalizada de las madres solteras y sus hijos les robó a estas personas a veces su futuro", ha dicho.
Este miércoles tendrá lugar una disculpa pública por los hallazgos del informe en la Asamblea de Irlanda, la Cámara Baja del Parlamento del país.