El tiroteo que tuvo lugar en la localidad tejana de Odessa este fin de semana dejó finalmente 7 muertos y una veintena de heridos, entre ellos Anderson Davis, una niña de 17 meses.
A pesar de sus heridas, se espera que la niña se recupere por completo. Según cuenta su madre Kelby Davis en Facebook, la niña ya ha sido intervenida. Tenía metralla en el pecho y un agujero que le atravesaba el labio inferior y le ha dañado la lengua y los dientes frontales.
"El cirujano pediátrico le abrió el pecho para extraer los fragmentos de bala que pudo recuperar. Todavía hay un trozo de metralla en su pecho que no se puede recuperar en este momento, pero que no debería causarle ningún problema. Hay algunas piezas muy pequeñas de metralla en su cara que no vale la pena recuperar" escribió sobre la operación.
Kelby también cuenta como sucedieron los hechos, al parecer, estaban parados en un semáforo de su ciudad natal cuando una bala atravesó su automóvil y golpeó a la pequeña Anderson en la boca y en el pecho.
El agresor fue abatido a tiros y justo hoy, un día después del tiroteo entra en vigor una nueva ley para comprar armas con más facilidad.
"Les pido que se unan a nosotros en oración y apoyo para todas las otras personas que resultaron heridas ayer o asesinadas. Nuestras vidas podrían verse muy diferentes hoy, como la de demasiadas personas, y para ser honesto, tengo una extraña culpa de cómo nuestra historia terminó tan felizmente" añade.