Al menos 35 personas han muerto como consecuencia del impacto el pasado martes de un proyectil ruso contra un edificio de la administración pública en Mikolaiv, la ciudad ucraniana convertida en una morgue.
El presidente de la administración regional, Vitali Kim, ha informado de la nueva cifra de víctimas mortales consecuencia del impacto a primera hora del martes de un proyectil ruso contra un edificio administrativo de nueve plantas sede de la administración regional.
Entre los desparecidos tras le impacto está la presidenta de la Sociedad Bielorrusa, Tatiana Demenikova, que trabajaba en el departamento de Economía de la administración regional, informa la prensa ucraniana.
Mientras, unas 60 personas continúan con las labores de desescombro, por lo que no se descarta que pueda aumentar el balance definitivo de víctimas de este ataque.
Las autoridades ucranianas han informado este sábado de disparos de cohetes rusos sobre varias ciudades importantes del sur del país, a medida que han intensificado los combates en algunas zonas de Ucrania.
En la ciudad de Dnipro se han escuchado entre dos y tres "fuertes explosiones" durante la noche del sábado, según ha informado el portal Ukrayinska Pravda, citando a la administración regional.
Los alrededores de la ciudad de Krivói Rog han sido bombardeados con lanzacohetes. Además, una gasolinera ha salido ardiendo, según ha asegurado el jefe de la administración militar local, Oleksandr Vilkul.
Por otra parte, en la ciudad portuaria de Odessa, en el Mar Negro, varios edificios han sido alcanzados por cohetes durante la noche.