Muere una niña de 13 años por un linfoma mal diagnosticado para el que le recetaron antibióticos
Se dieron cuenta de la grave situación de la joven cuando la habían mandado a casa
Su pasión era el fútbol y había hecho pruebas para jugar en Arsenal
Una adolescente ha fallecido el día después de que los médicos le diagnosticaran cáncer. La valoración llegó tarde. Tanisha Baverstock, que así se llamaba la joven, se podría haber salvado. Así lo denuncia su madre, quien acusa de negligencia a los médicos.
Ocurrió en Salisbury, Inglaterra. La joven, jugadora de fútbol, murió a causa de un linfoma, un cáncer de sangre que puede tratarse con facilidad si se identifica a tiempo, informa MailOnline.
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Tanisha, de 13 años, sufrió durante semanas una intensa tos y pérdida de peso. Acudió al ambulatorio, donde le hicieron una radiografía. A pesar de que en ella aparecía un inusual sombra en el pulmón, le dieron el alta recetándole antibióticos y sin que la observara un radiólogo. A los pocos minutos de que se marchase, el especialista observó la imagen negativa y reconoció el tumor. Etiquetó el caso como 'código rojo', es decir, de una urgencia extrema.
Al comprobar que la joven se había ido a casa, se apresuraron a llamarla, pero se hizo de noche y el tratamiento tuvo que ser pospuesto hasta el día siguiente.
Murió 52 horas después de acudir al centro sanitario
Tanisha acudió de urgencia al hospital de Bristol. Los médicos trataron de intervenirla extrayendo el líquido que obstruía sus pulmones y su corazón, pero, trágica mente, murió solo 52 horas después de que le realizasen la radiografia.
La madre de Tanisha, Kelly, de 39 años, lamenta la pérdida de la pequeña: "No te recuperas de la pérdida de un hijo, especialmente cuando sus médicos le han fallado tanto. Un día la mandan a casa con antibióticos. Al día siguiente recibo una llamada telefónica que dice que tiene cáncer. Fue intervenida de inmediato, pero no pasó nada. Fueron horas perdidas que podrían haberle dado una oportunidad a Tanisha".
Tanisha era amante del fútbol y practicaba este deporte con éxito. Tanto que, junto con otras niñas, había participado en unas pruebas para ser jugadora en el Arsenal Football Club. Sus familiares y amigos lloran la trista pérdida. De momento, en el centro hospitalario, se ha abierto una investigación interna que determinará si hubo o no negligencia por parte de los facultativos.